La trágica historia del doble de Harry Potter que quedó en silla de ruedas

La saga de Harry Potter, además de ser un fenómeno mundial, catapultó las carreras de actores como Daniel Radcliffe y Emma Watson. Pero más allá de las luces en pantalla, detrás de escena se esconden historias poco conocidas y no menos impactantes: una de ellas es la de David Holmes, el doble del protagonista.

David Holmes es un acróbata 42 años que fue parte del elenco de la saga del mago y cuya vida cambió drásticamente al quedar paralítico tras un incidente en el set. La noticia es que ahora tendrá su propio documental, narrando lo que pasó.

Al día de hoy recuerda vívidamente lo que sucedió cuando se unió al equipo de dobles de Harry Potter. Era agosto de 2000 y se estaba preparando la primera película. “En mi primer día de trabajo tuve que ser el primer jugador de Quidditch del mundo”, relata.

“Pusimos un palo de escoba en la parte trasera de un camión y lo condujimos por la pista de Leavesden Studios, con [el director] Chris Columbus mirando por la lente de una cámara voceando y lanzando hurras y diciendo ‘Sí, creo que así es como vamos a hacer Quidditch’”, continuó.

El joven y talentoso gimnasta todavía era adolescente para ese entonces, y se le pidió ser el doble principal de Daniel Radcliffe (Harry Potter). Para ello debía realizar acrobacias demasiado arriesgadas para la estrella, que entonces tenía 11 años. Los dos rápidamente forjaron una amistad que perdura hasta el día de hoy.

Pero previo al rodaje de la séptima película, Las Reliquias de la Muerte, Parte 1, en enero de 2009, David Holmes resultó gravemente herido. Mientras ensayaba una acrobacia en la que lo tiraban rápidamente hacia atrás con un arnés, se rompió el cuello. La lesión de la médula espinal resultante lo obligó a permanecer en el hospital durante varios meses.

Como consecuencia de todo esto quedó permanentemente paralizado del pecho hacia abajo y ahora usa silla de ruedas. Hoy, casi 15 años después, su vida se transforma en un documental: David Holmes: The Boy Who Lived

Allí detalla sus experiencias y la forma en que sus amistades cercanas -incluido Daniel Radcliffe- fueron vitales tras el accidente. “Algunas cosas no son las más fáciles de digerir. Solo quiero ser honesto. Vivir con el cuello roto es difícil. Romperme el cuello me convirtió en un hombre. Y mirando hacia el pasado, estoy muy agradecido de haber logrado conservar mi sentido de identidad, que es probablemente mi mayor logro”, confesó.