El prontuario criminal oculto de Mark Wahlberg
Es una de las grandes estrellas de Hollywood, sin embargo tiene un pasado casi desconocido.
Mark Wahlberg se convirtió en una especie de figurita repetida en la gran mayoría de las películas de acción. Lo cierto es que el actor es uno de los favoritos del momento, y todas las productoras se pelean por tenerlo dentro de sus proyectos.
Sin embargo, sus primeros pasos en el mundo artístico los dio como parte del grupo de rap, Marky Mark & the Funky Bunch, que tuvo mucho éxito cuando lanzaron el disco Music for the People, que contiene canciones como Good Vibrations y Wild Side. En aquella época, también hacia algunos trabajos como modelo, para marcas como Calvin Klein.
Aunque Mark Wahlberg es uno de los favoritos de Hollywood, y hasta fue nominado al Óscar como Mejor actor de reparto por su papel en la película Los Infiltrados, en su historial se esconde un prontuario criminal desconocido.
El actor tiene un pasado en el que la violencia es protagonista. Tuvo varios episodios de ira, violencia racista, y hasta estuvo preso por una causa en la que lo imputaron por intento de homicidio.
Pero todo tiene una explicación. Mark Wahlberg nació en una familia de clase humilde trabajadora, siendo el menor de nueve hermanos. Cuando tenía 14 años, dejó el colegió y se refugió en la calle, cometiendo algunos delitos menores, como robos pequeños o actor de vandalismo.
Según confirmó el medio Today I Found It, el galán de Hollywood estuvo involucrado durante dos años de su difícil adolescencia con una pandilla que se encargaba de traficar drogas en su barrio.
A lo largo de ese periodo, en el que también era un adicto a la cocina, protagonizó entre 20 y 25 incidentes relacionados con robos y episodios de violencia callejera. Su primera causa, en aquel tiempo, fue por racismo en 1986, cuando el actor persiguió por la calle a varios chicos afroamericanos.
Dos años después, vivió uno de los peores episodios de violencia en su vida. Mark Wahlberg le partió un palo en la cabeza a un hombre de origen vietnamita y le pegó en el ojo a otro. Aquel acontecimiento ocurrió en abril de 1988 sin ningún motivo previo y mientras le gritaba: “Sos una maldita mierda de Vietnam”.
Por ese hecho de violencia desmedida, pasó 45 días detenido en un corresponsal de menores. Sin embargo, su pena era de dos años de sentencia por intento de homicidio. Cuando quedó en libertad, la estrella de Ted aseguró que había cambiando. Y así fue, porque desde entonces su vida dio un giro de 180 grados.