Un minuto de aplausos: el íntimo ritual argentino después de cada práctica

En menos de 24 horas la Selección argentina de básquet tendrá otra cita con la historia, algo a lo que nos ha acostumbrado en el presente siglo, al disputar frente a España la final del Mundial China 2019, partido que se jugará  a las 9 en Beijing con transmisión en directo de la TV Pública, TyC Sports y DirecTV Sports.

Hoy, con la mente puesta en lograr el título por segunda vez en la historia, el plantel de Sergio Hernández completó una nueva práctica en una de las canchas auxiliares del Wukesong Arena, sede de la final, y terminada la misma se volvió a repetir un curioso ritual que se convirtió en tradición para el equipo.

Después del entrenamiento, en el que hubo sesión de tiros al aro y una charla táctica pensando en España, todos los jugadores, cuerpo técnico y colaboradores se reunieron en ronda en el medio de la cancha y se pusieron a aplaudir por alrededor de un minuto.

Más que una cábala, este momento íntimo y particular del plantel se convirtió en un símbolo de la unión del equipo, uno de los pilares del grupo que está reunido hace casi 60 días, desde antes de la gira por Francia, un paso por Japón y la disputa de los Panamericanos Lima 2019, con oro incluido.

La fortaleza de este grupo se forjó a lo largo de estos días y la unión lograda fuera de la cancha se ha podido reflejar a la hora de jugar. "Cuando más disfrutamos, mejor jugamos", analizó ayer el Oveja Hernández tras conseguir el boleto a la final. La identidad de esta Selección, que el año que viene disputará por quinta ocasión consecutiva los Juegos Olímpicos en Tokio, ya quedó en la historia, aunque va por más.

"Este equipo tiene cosas de la Generación Dorada", avisó el capitán, Luis Scola.