Menudo sorpresón se llevaron los miles de turistas que se acercaron a pasar un día de playa en el mar Báltico en busca de tranquilidad. Un enorme barco de la marina rusa penetró el miércoles en tierra firme ante la sorpresa de los bañistas y personas que estaban en la playa.
Puede parecer increíble pero, aunque parezca imposible dado que la playa estaba repleta de gente, nadie resultó herido. El Ministerio de Defensa ruso ha informado que era un ejercicio de encallamiento.
La nave invadió la playa de Mechnikovo, cerca de Kaliningrado (Rusia), y llegó hasta la misma orilla de la playa, que según el Ejecutivo ruso "está en terreno militar".