Historia

San Martín, el hombre fundamental

Un repaso por la historia de José de San Martín, un hombre fundamental para la vida de Argentina. 

sábado, 17 de agosto de 2019 · 15:28 hs

Al cumplirse el ciento sesenta y nueve aniversario del fallecimiento del General José Fran-cisco de San Martín me permito compartir estas sencillas reflexiones acerca de aquel hombre al cual con justicia reconocemos como el Padre de la Patria.

Muchas veces cabe preguntarnos cuanto conocemos de la persona del Libertador, pues re-sulta fácil a la memoria recordar su nacimiento en Yapeyú Provincia de Corrientes, su parti-da a España, su regreso a la patria, el combate de San Lorenzo, el cruce de la cordillera de los Andes, Chacabuco, la un tanto olvidada Cancha Rayada, Maipú, el Perú, Guayaquil y su obligado exilio. Es decir aquellos acontecimientos que resultan imbuidos en la conciencia colectiva y que son de fácil acceso a la memoria, y me permito condensarlos aquí parafra-seando los versos de la Marcha de San Lorenzo en cuanto refiere “…sonidos de corceles y de aceros…”.

Entonces cabe preguntarnos, José de San Martín, un militar de carrera, un estratega que lo-gro vencer en batallas decisivas a un ejército el español que en sus mochilas contaba más de mil años de antigüedad y lo hizo con hombres que conformaron un ejército de no más de diez a veinte años de su origen y formación, ese genio militar, ¿tuvo un pensamiento político y si lo tuvo cuál fue?. Sin lugar a dudas, el ejercicio de la Gobernación Intendencia de Cuyo implicó un cargo político y desde allí su influencia sería decisiva sobre el Congreso de Tu-cumán para la Declaración de la Independencia. Pero éste no sería el único cargo político que ocupó el Libertador, luego de declarada la independencia de Chile se le ofrece el cargo de Director Supremo de aquel país y no lo acepta ocupándolo su compañero de armas y amigo Bernardo de O´Higgins, y será el Perú en el cual desarrolle nuevamente su faz políti-ca cuando se desempeñó como Protector.

Sin embargo su pensamiento y su accionar también estuvieron dotados de lo que sin temor a equivocarnos conceptualizamos como grandeza política, el 13 de marzo de 1819 le escribe a Artigas: “…cada gota de sangre americana que se vierte por nuestros disgustos me llega al corazón. Paisano mío, hagamos un esfuerzo, transemos todo, y dediquémonos únicamente a la destrucción de los enemigos que quieran atacar nuestra libertad. No tengo más pretensio-nes que la felicidad de la patria. En el momento que ésta se vea libre renunciaré el empleo que obtenga para retirarme; mi sable jamás se sacará de la vaina por opiniones políti-cas…”.

Como vemos la decisión inquebrantable de San Martín lo lleva a adoptar otra decisión polí-tica, su voluntario exilio y a la vez dota al ser nacional de su mayor legado. Así el 10 de febrero de 1824, junto a su hija Mercedes el General José Francisco de San Martín, Genera-lísimo de los Ejércitos del Perú, Capitán General de los de Chile y Capitán General del Ejército de los Andes, embarcaba rumbo a Europa en el navío francés Le bayonnais, nunca más pisaría el territorio de nuestro país. Los restos de aquel hombre al que con justicia lla-mamos el Padre de la Patria fueron repatriados 30 años despúes de su paso a la inmortali-dad.