Corte Interamericana debate caso que puso el aborto en el centro de la escena en El Salvador

La verdad del caso: Beatriz, una mujer que sufría lupus, esperaba su segundo hijo, quien fue diagnosticado con anencefalia. Cuando los médicos calificaron al embarazo como riesgoso, grupos abortistas salvadoreños se acercaron y le hicieron creer a Beatriz que iba a morir si no se realizaba un aborto. Además, sostenían que su hija no iba a vivir. Ella, por miedo a morir y dejar huérfano a su primer hijo, solicitó al estado la práctica abortiva.

Tiempo después, diversos estudios demostraron que el embarazo no ponía en riesgo la vida de Beatriz y el Estado le denegó el acceso al aborto. El 3 de junio de 2013 dio a luz a su hija, una bebé anencefálica. Su madre la llamó Leilani y falleció a las cinco horas a causa de su enfermedad. Contrariamente a lo que los grupos abortistas creían, Leilani respiró, lloró y recibió el amor de su madre.

Meses después, Beatriz manipulada por grupos defensores del aborto, pidió a éstos que presenten su caso ante la CIDH. La petición es que ninguna otra mujer sufra lo que ella vivió, poniendo en riesgo su salud física y mental. Beatriz se recuperó favorablemente de la cesárea y siguió con su vida. Visitaba a su hija al cementerio, le llevaba flores y deseaba que estuviera viva.

En 2017, Beatriz falleció a raíz de un accidente de moto. Los peticionarios del caso atribuyen que parte de la culpa de su muerte estuvo relacionada con la decisión de no suministrarle el aborto. La realidad es que no hay pruebas de que esto haya sido así. 

La gravedad de una sentencia negativa: si la CIDH decide condenar al Estado de El Salvador, el aborto podría ser exigido en toda América Latina. Esto se debe a que las sentencias emitidas por la Corte son de carácter obligatorio para los estados que forman parte de la OEA.

Esta estrategia legal no solo amenaza a los países que penalizan la práctica abortiva, sino también dificultaría la derogación de la leyes en los estados que ya aprobaron el aborto o lo tienen legalizado bajo ciertas circunstancias.

Ana Mármora, es abogada, periodista, diplomada en Derechos Humanos por la Universidad Austral, "Este caso es extremadamente importante para toda la región porque es la primera vez que la Corte Interamericana se expediría  sobre el aborto puntualmente, y esto puede provocar que los países que aún no lo tienen legalizado sientan la presión de tener que hacerlo o también puede hacer que países como el nuestro que ya tienen una ley de aborto tardemos un poco más el verdadero avance de derechos que es derogar esta ley y exigirle a los estados que aseguren y salvaguarden el derecho más básico, que es el derecho a la vida y que para eso generen las condiciones para que las mujeres podamos tener a nuestros hijos de manera segura, que son las verdaderas deudas en materia de derechos humanos para seguir protegiendo la vida y la dignidad de todas las personas en el continente".

Para más información, se puede visitar el sitio www.casobeatriz.org.