Incendios en Corrientes

La Casa de Corrientes recibe donaciones entre sapucai y desolación

Raúl Benítez Alias, delegado de la Casa de Corrientes en Buenos Aires, dice que la provincia podría tardar una década en alcanzar el nivel productivo que tenía en noviembre. Sin embargo, confía en que se puede acelerar la recuperación y celebra la solidaridad "a puro sapucai".

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MDZ Sociedad lunes, 21 de febrero de 2022 · 21:33 hs

La Casa de Corrientes en Buenos Aires abrió sus puertas para quienes quieran acercar donaciones. Este fin de semana en el edificio de Maipú 271 donde funciona el organismo se vivieron jornadas de intenso trabajo y mucha emoción. "Entraban las donaciones a los sapucai", cuenta Raúl Benítez Alias, emocionado por la solidaridad de las personas particulares, las empresas y las organizaciones. "Se hizo una cadena de ayudas, llegó a haber tres cuadras de autos esperando para donar. Vino Alfredo Casero y se ofreció como colaborador en forma espontánea. Primó la solidaridad de la gente", agregó. 

Sin embargo, es consciente de la urgencia y gravedad de los incendios en Corrientes. No se deja llevar por la emoción ni que la desesperación por tener más ayuda le quite transparencia o efectividad al proceso. Aclara que -todavía- no reciben dinero porque "aun no está constituida la cuenta que queremos que tenga un auditor externo", dice. 

La charla se interrumpe porque, a cargo de la logística debe reunirse con empresarios que realizan grandes donaciones -por ejemplo, miles de litros de combustible- y atender a los requerimientos de los voluntarios que reciben donaciones. Todo suma, pero es importante hacer que la ayuda llegue de la forma más eficiente. 

"Tenemos una lista de al menos 20 ítems subdividida en tres grupos: comidas -incluye aguas, bebidas energizantes, obleas, etc)-, equipamiento, es decir ropa y botas para bomberos y voluntarios, y medicamentos, tanto para humanos como para animales", comenta. Y agrega que esto es lo que se precisa en primera instancia. "Hasta ahora se perdió el 10% del territorio nuestro. Más de 800.000 hectáreas. Habrá que hacer un inventario para saber qué se necesita a mediano y largo plazo", acota. Al respecto, comenta que ya empezó a llegar la ayuda para "el día después". Entre otras cosas, una importante donación de alambre de púas que será un insumo necesario en la reconstrucción. 

Cree que ese proceso tomará una década. No sólo por las perdidas materiales sino también porque los incendios arrasaron con el ánimo de la gente. "La provincia puede tardar 10 años en recuperar el nivel óptimo que teníamos en noviembre", asegura y luego de una pausa, reconoce que la provincia se activará en menos tiempo: "Aun así, calculo que tomará por lo menos 3 años empezar la recuperación". 

Es prudente al hablar. Pero en cuanto explica que la zona más afectada es la que rodea a los esteros de Iberá, Comenta al pasar que "el origen de esto es un combo: cambio climático, sequía prolongada, malas prácticas agrícolas y también algunos casos de incendios intencionales, delictuales o de algún desquiciado", afirma. Adelanta que perseguir e investigar a quienes comienzan los incendios es una prioridad para la fiscalía de la provincia que ya está trabajando detrás de algunos casos.

Prefiere concentrarse en la misión urgente: recibir y distribuir la ayuda que sirva para mitigar el daño de los incendios en Corrientes. "Nosotros coordinamos esfuerzos y búsqueda de ayuda de individuos de a pie que quieren donar y ser voluntarios", expresa. "La urgencia es el agua, la comida, la ropa para los bomberos o los medicamentos". 

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