Lo obligaron a trabajar, pero era grupo de riesgo y murió de covid

Miguel Ángel Olmedo era guardia de seguridad. A veces le tocaba ir a Ciudad de Buenos Aires y otras a localidades de la Provincia. Tenía 64 años, problemas coronarios e hipertensión. Su familia denuncia que, aún conociendo esos datos, la empresa en la que trabajaba -Murata S.A- lo obligó a seguir trabajando. ¿El resultado? El hombre murió a causa del coronavirus.

Ocurrió en Bosques (Florencio Varela, Pcia. de Buenos Aires). La familia del fallecido contó al portal MinutoUno que al principio de la pandemia, Olmedo había hablado con Recursos Humanos para que le dieran licencia. De hecho se la otorgaron, pero solo hasta el 13 de abril. A medida que se alargaba el aislamiento obligatorio, desde la empresa empezaron a insistirle para que volviera a ocupar su puesto.

Le faltaban tres meses para jubilarse. Tal vez por eso el hombre cedió ante las presiones. Desde la compañía, además, lo trasladaron. Y si antes custodiaba el Cementerio de Recoleta, su nuevo espacio laboral fue la Villa 31, donde el riesgo de infección era mucho mayor.

El fin

En una secuencia vertiginosa, el guardia comenzó a mostrar síntomas el 12 de mayo. El 19 los médicos confirmaron que se había contagiado de covid. Falleció el 28.

El Sindicato Unido de Trabajadores Custodios Argentinos (SUTCA) consideró el hecho como un "acto criminal". "Es histórica la impunidad conque se maneja Murata, elenco estable de todas las licitaciones habidas y por haber dentro de la Ciudad de Buenos Aires", apunta el comunicado.