Gesell: los celulares, el bullying y un video comprometedor

El crimen de Gesell sigue ofreciendo detalles sorprendentes. Este lunes se conocieron algunos resultados de los peritajes que se hicieron sobre los celulares de los rugbiers. Se supo, por ejemplo, que los teléfonos estaban llenos de memes y cargadas contra Pablo Ventura, el joven al que los detenidos señalaron en un principio como responsable de la muerte de Fernando Báez Sosa.

Como resultado de aquella acusación inicial, el muchacho -que no pertenece al grupo de los rugbiers- pasó cuatro días preso. Luego demostró no haber estado nunca en el lugar de los hechos y quedó en libertad. Pablo es el típico "grandote" -mide más de 1,95 m- y sus amigos lo describen como una persona muy tímida y tranquila. Un blanco ideal para el bullying.

Las burlas eran verbales, pero también incluían memes y fotos que los agresores intercambiaban en las redes sociales. Varias fuentes allegadas al caso se declararon descolocadas ante el ensañamiento que mostraban esos mensajes. "Algunas de esas cargadas eran de hace mucho tiempo", explicó a la prensa uno de los investigadores.

El padre del joven, José María Ventura, declaró que demandará a los rugbiers por haber señalado a su hijo como autor del homicidio. "Cada vez que hacían una macana, estos chicos decían que lo había hecho Pablo -acusó el papá de Ventura en un momento-. ¡Tiraron su nombre como una broma!".

"No escriban más que lo matamos"

Los teléfonos analizados pertenecen a nueve de los diez detenidos por el asesinato de Fernando Báez Sosa el pasado 18 de enero. Falta uno de los dispositivos, el de Ayrton Viollaz (20), que dijo no tener celular. 

En el contenido de los aparatos hay conversaciones escalofriantes. "No escriban más que lo matamos",  decía el mensaje que uno de los acusados envió al grupo de Whatsapp que compartía con los otros involucrados en el crimen de la discoteca Le Brique. Los pesquisas no especificaron quién redactó esas palabras, ya que deslindar esos detalles será tarea de la fiscal Verónica Zamboni. De todos modos, el dato sugiere que los acusados tenían conciencia de lo que habían hecho.
 

¿Filmaron el crimen?

Otra de las informaciones que trascendió a lo largo de la tarde del lunes apunta a que entre la gran cantidad de información que se recuperó -algunos de los celulares almacenaban hasta 300 GB- habría un video en alta definición que los propios agresores grabaron durante el ataque a Fernando.

Se espera que en los próximos días se den a conocer las nuevas pruebas surgidas de las pericias que concretó la División de Operaciones Técnicas de la Agencia Regional de la Policía Federal Argentina (PFA) Mar del Plata.