Reportajes

La inteligencia artificial se abre paso y modifica los viajes en tren

Siemens vendió a los primeros clientes el nuevo sistema de reconocimiento de agresiones junto con la entrega de nuevos trenes. En tres años la Ostdeutsche Eisenbahngesellschaft (Odeg) se propone que estos trenes ya estén funcionando en varias líneas ferroviarias regionales en Berlín y Brandeburgo.

viernes, 26 de abril de 2019 · 09:49 hs

Alborotadores, borrachos, fanáticos frustrados de algún equipo de fútbol, quien viaja en tren no siempre encuentra compañías agradables. En los trenes de Berlín próximamente funcionará un software que, con ayuda de un sistema de reconocimiento de agresiones, dará la alarma cuando se produzcan peleas en los vagones.

Elevado volumen, movimientos rápidos: si dan señales de ataques, la central recibe un aviso. Este sistema es apenas un ejemplo de cómo la tecnología digital y la inteligencia artificial pueden modificar los viajes en tren.

Ya hace tiempo que hay sensores que ayudan a mostrar dónde quedan lugares libres en los trenes. La vigilancia por video reconoce en los subterráneos de París si aún permanecen pasajeros en los vagones cuando la formación se dirige a la cochera.

En la Deutsche Bahn es posible validar el propio boleto en el teléfono móvil, con lo que ya no es necesaria la intervención del guarda.

Las revistas especializadas internacionales se refieren a "Trains with brains" (trenes con cerebros). Sin embargo, aún no puede hablarse en absoluto de una aplicación de tecnología a gran escala en el rubro ni de innovaciones esenciales que sean ampliamente percibidas por los pasajeros.

Siemens vendió a los primeros clientes el nuevo sistema de reconocimiento de agresiones junto con la entrega de nuevos trenes. En tres años la Ostdeutsche Eisenbahngesellschaft (Odeg) se propone que estos trenes ya estén funcionando en varias líneas ferroviarias regionales en Berlín y Brandeburgo.

La empresa ferroviaria Odeg habría adquirido los trenes también sin el nuevo sistema, comenta su gerente, Arnulf Schuchmann. "El hardware es obligatorio, el software es optativo", apunta.

La ventaja adicional del hardware existente es el sistema de registro de video, dice Claus Bahlmann, jefe de desarrollo de software inteligente de Siemens en Berlín-Adlershof.

"Cualquier preprocesamiento automático de las imágenes ayuda al hombre", señala y recuerda que los guardas no pueden estar en todos los vagones al mismo tiempo.

Siemens Mobility desarrolla en sus laboratorios otras innovaciones digitales para trenes. Por ejemplo, un software que determina la pieza de repuesto adecuada cuando un trabajador sostiene su teléfono móvil delante de un componente defectuoso. Y también cámaras para trenes que ayudan a detectar si las vías deben ser renovadas.

La tecnología ferroviaria es un mercado creciente en el mundo, de acuerdo con los estudios del rubro. Sobre todo China e India están en fase de expansión.

Los fabricantes europeos -solamente en Alemania dan trabajo a 50.000 empleados- podrían diferenciarse de la competencia china, que cada vez apunta más hacia Europa mediante la tecnología digital y la inteligencia artificial.

"El tema de la digitalización aportó un impulso totalmente nuevo", se entusiasmó el presidente de Deutsche Bahn, Richard Lutz, durante la feria especializada Innotrans en el otoño boreal pasado.

El director de infraestructura de la empresa, Ronald Pofalla, opinó sin embargo: "Mi impresión es que las capacidades de investigación de la economía alemana ciertamente podrían incrementarse con este propósito".

El fabricante de sistemas de freno Knorr-Bremse invirtió recientemente 10 millones de dólares en una start-up israelí. Mediante cámaras infrarrojas y de video sus sistemas reconocen obstáculos, una condición previa para trenes de conducción autónoma.

El proveedor de tecnología ferroviaria Thales hizo maniobrar tranvías sin conductor a las cocheras en Karlsruhe a fines de 2018. "El tema de la inteligencia artificial se encuentra todavía en una fase inicial en el rubro ferroviario", comentó un portavoz de la empresa.

Siemens, en tanto, puso a circular un tranvía de manera autónoma a través de Potsdam, al sur de Berlín, en el otoño boreal pasado. Posteriormente, los servicios de transporte público concluyeron que aún faltan 20 años para el lanzamiento al mercado.

"Desde hace décadas que en los aviones existe el piloto automático", subrayó Schuchmann, jefe de la Ostdeutsche Eisenbahn, quien se manifestó asombrado por el hecho que este proceso lleve tanto tiempo en los trenes.

Esto también se aplica para el sistema europeo de gestión del tráfico ferroviario ETCS (European Train Control System). "Es lamentable que aún no hayamos llegado más lejos", comentó.

En lugar de señales a lo largo del recorrido, la tecnología de control y seguridad se basa en sistemas de radio, sensores y puestos de enclavamiento digitales. Actualmente solo está disponible en la nueva línea entre Berlín y Múnich.

Los trenes pueden, por lo tanto, circular con menor intervalo entre uno y otro. Se estima que puede haber un 30 por ciento más de trenes en la red si se introduce el ETCS a gran escala. Sin embargo, su costo ascendería a muchos miles de millones de euros.