Falso testimonio

El video que complica a la docente que dijo que la secuestraron

Corina De Bonis fue imputada por falso testimonio luego de que se detectaran muchas inconsistencias en su relato. Un video captado por las cámaras de seguridad muestra que no fue secuestrada y que mintió sobre lo ocurrido el 11 de septiembre de 2018.

miércoles, 24 de abril de 2019 · 12:03 hs

El miércoles 12 de septiembre de 2018, la noticia de que una docente de la ciudad bonaerense de Moreno había sido secuestrada y torturada sacudió a todo el país. Corina De Bonis exhibió su abdomen y denunció que le habían tajeado: "Ollas no". A 223 días de aquel suceso, la Justicia decidió imputar a la docente por falso testimonio.

De Bonis fue procesada. En su imputación también se contempló la falsa denuncia. "Inconsistencias en su relato" y un "análisis que en tiempo y espacio no coinciden", explicaron fuentes judiciales en relación a las razones por las que la docente fue imputada.

En las últimas horas se difundió un video captado por las cámaras de seguridad en el lugar y la hora en la que la docente aseguró haber sido secuestrada por los ocupantes de un vehículo rojo. En las imágenes se ven dos vehículos de esas características pasando por el lugar, pero no detienen su marcha ni se acercan a la mujer.

La docente en el Centro Educativo Complementario (CEC) 801 había denunciado que tres hombres la secuestraron y la amenazaron cuando salía de su trabajo. También relató que la interceptaron a bordo de un vehículo color rojo el 11 de septiembre, cerca de las 17, y narró que se bajaron, le pegaron y la obligaron a subir al vehículo.

Allí, según De Bonis, continuaron agrediéndola, le colocaron una bolsa en su cabeza y le escribieron con un punzó en el abdomen.

El fiscal Emiliano Buscalia, a cargo de la UFI N° 5 del departamento judicial Moreno-General Rodríguez, había imputado el 9 de octubre de 2018 a la vicedirectora del CEC, María Fuentes, también por falso testimonio.

De Bonis había empezado a participar de las ollas populares luego de que se suspendieran las clases en distintas escuelas de Moreno tras la explosión en un comedor escolar que provocó la muerte de dos personas.

A raíz de aquel episodio, denunció haber recibido una serie de amenazas telefónicas. Sin embargo, las pericias judiciales determinaron que, en realidad, los llamados presuntamente amenazante fueron efectuados por la misma De Bonis.