Presenta:

La mamá de Camila no quiso presenciar la desconexión

Selva Herbón logró ayer que su hija dejara de ser asistida por un respirador artificial, amparada por la nueva norma. Sólo un amigo de la familia y varios especialistas concurrieron a la sala donde la nena murió.
399741.jpg
Ayer al mediodía, se dispuso retirar el soporte vital a Camila Sánchez por pedido de sus padres, luego de que el 9 de mayo pasado el Congreso aprobara la denominada Ley de Muerte Digna, precisamente a partir de algunos casos puntuales, entre ellos el de esta nena, que murió luego de haber estado durante sus tres años de vida conectada a un respirador, con una encefalopatía crónica.

Según publicó hoy el diario Página 12, el personal designado para realizar el procedimiento le preguntó a Selva Herbón, mamá de la nena y símbolo de la lucha por la aprobación de la ley, si quería ingresar a la sala para presenciar los últimos minutos de la vida de su hija. Pero ella prefirió que lo hiciera su amigo y compañero en la militancia por esta ampliación de derechos, Marcelo Velis. “La situación es dura. El quite de respirador y observar cómo iba reaccionando... Duró unos minutos y luego tuvo un paro cardiorrespiratorio, como estaba previsto. Eso fue todo”, detalló Velis.

El procedimiento comenzó pasadas las 10 y duró hasta las 12:15, según Marcelo. A la habitación asistieron Marcelo, el presidente del directorio del Hospital Centro Gallego, el jefe del servicio de cuidados crónicos y el médico tratante de Camila. Mientras tanto, Selva aguardaba en la sala de espera junto al especialista en bioética Juan Carlos Tealdi, que la acompaña y asesora desde que evaluó el caso de su hija para la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación el año pasado.

"Tenemos, por un lado, el dolor de la pérdida. Pero por otro, la paz de haber conseguido que cese el encarnizamiento terapéutico y la esperanza de que habrá un reencuentro", dijo Selva.

A través de su cuenta en Facebook, expresó: "Camila, nuestro ángel, partió", para dar a conocer de esa manera el fallecimiento de su hija menor, que había nacido el 27 de abril de 2009 en una clínica de la localidad de Monte Grande, con diagnóstico de una encefalopatía crónica no evolutiva.

Tras publicarse la noticia, la madre de Camila dijo que tienen la decisión de llevar el domingo próximo las cenizas de la pequeña "a Uribelarrea, a un hermoso Santuario de Nuestra Señora de Luján".

Remarcó, en declaraciones al diario Crónica, que la familia ahora se siente "bien, tranquilos, pero a la vez hay un sentimiento extraño. Es una mezcla de sensaciones difícil de explicar".

Fuente: Infobae.