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El estado de las señales de la accidentada ruta 7

En Gendarmería dicen que la ruta 7 está perfectamente señalizada y en muy buen estado. Asimismo, desde la empresa CATA aseguraron que el micro no iba con exceso de velocidad.
El cartel indica una máxima de 20, el micro iba a 80 km/h. Foto: Gonzalo Bravo / MDZ
El cartel indica una máxima de 20, el micro iba a 80 km/h. Foto: Gonzalo Bravo / MDZ

Aproximadamente a las 22 de ayer, el interno 166 de CATA salía de la Terminal del Sol, en la ciudad de Mendoza, con destino a Chile. El viaje iba ser de pocas horas. Sin embargo, un posible error humano del conductor del colectivo provocó una tragedia que tuvo más de 40 heridos, dos víctimas fatales y un niño al que se le ha amputado un brazo.

Una vez consumado el accidente, había que descubrir cuales fueron las causas de la tragedia. La primera versión es que el conductor se había equivocado de camino y realizó una curva que no debía hacer. La posibilidad de que Victor Noguera  - el conductor del micro – se hubiera equivocado en la curva se hizo fuerte, ya que en el lugar hay una señal vial que explica que en caso de seguir por la ruta 7 recto se llega a Potrerillos, en caso de hacer la curva uno se dirige al Perilago. Noguera, hasta ahora, inexplicablemente realizó lo segundo.

Desde CATA negaron que el micro viajara a una velocidad no permitida. El encargado de dicha versión fue el gerente de la empresa, Daniel Ghisolfi que relató a los medios de comunicación que “la tarjeta del tacómetro marcaba entre 80 y 82 kilómetros, así es que estaba dentro de la velocidad normal para la zona”.

Sin embargo, en el lugar se muestran numerosos carteles que advierten sobre obras de construcción. El primero aparece a 500 metros del accidente, el segundo a 300. Además hay una señal que advierte sobre las entradas y salidas de camiones.

También, se encuentra el ya mencionado que explica por donde seguir hacia Potrerillos y que todo conductor que doble a la derecha se dirigirá al Perilago y no a Potrerillos exactamente.

Pero los dos carteles más importantes y que afectan lo explicado por Ghisolfi son dos señales que piden o obligan a los conductores a reducir la velocidad, primero a un máximo de 40 kilómetros por hora y luego a 20, lo que el colectivo de CATA no habría hecho anoche y con ello posibilitó que la curva que lleva al Perilago no la pudiera doblar de una manera efectiva y se terminara saliendo de la ruta para luego volcarse.

Según vecinos del lugar, es común que los colectivos y los camiones no respeten este tipo de señales. Incluso explicaron que muchas de las señales que existen en el lugar las colocó la empresa que se encarga de la construcción del camino del Perilago, por lo que reclamaron por mejor señalización.

También, MDZ pudo observar que los camiones tampoco respetan y se traspasan cuando no deben (habiendo doble  línea amarilla) y lo hacen a velocidades muy altas poniendo en riesgo sus vidas y las de las demás personas.

Habrá que ver cuales son las medidas que toma la Justicia de ahora en adelante. Por ahora, ya se tomó la primera medida y el chofer quedó imputado bajó la calificación de homicidio culposo. En tanto, hay que esperar por la evolución de los heridos en el accidente y tratar de que este tipo de tragedias no se vuelvan a repetir.