García Espetxe: "La rotación en cargos políticos no permite atacar la corrupción"

Después de trabajar a lo largo de 20 años en la Fiscalía de Estado en 2016 y tras cumplir labores como director de Asuntos Judiciales, Pedro García Expetxe, fue emplazado a jubilarse, lo que él mismo califica como "una forma elegante de echarte".

Este lunes en el programa "Otra Manera" por MDZ Radio comentó las razones que llevaron a su salida del órgano de control y apuntó a los factores que impiden que haya "una real lucha contra la corrupción", tal como anticipó hace tres años cuando salió de la función pública.

"Me emplazaron a jubilarme. Es una forma elegante de echarte. Era director. Siendo director tenía estabilidad y me sacaron la calidad de director", comentó al comentar la forma en que salió la fiscalía.

García Espetxe recordó que en ese momento dijo que no creía pasara nada con la corrupción y hoy confirma sus dichos ya que tres años después no hay causas en la que los funcionarios haya tenido algún castigo.

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García Espetxe manifestó además, que el principal problema" es la rotación de funcionarios que hay en los cargos políticos" y en la posibilidad que tienen los militantes de pasar directamente a un organismo de control.

"Pasan inmediatamente de funcionarios políticos a los organismos de control. El que viene con una mochila de 20 años de partido no tiene independencia", analizó.

Como ejemplo habló del fallo de la Suprema Corte que liberó a Miguel Bondino, Carlos Bianchinelli y Miguel Bondino de un cargo millonario del Tribunal de Cuentas. Destacó que todos los implicados fueron antes funcionarios políticos, pero no sólo ellos, sino también los jueces que tomaron la decisión de absolverlos.

García Espetxe hizo un repaso y recordó que en todos los organismos de control está lleno de exfuncionarios que tienen una carga política de la cual es muy difícil mostrarse independientes, algo fundamental a la hora de poder castigar los delitos de corrupción.

En ese caso está la Fiscalía de Estado, el Tribunal de Cuentas y la misma Suprema Corte, donde hay todos tipo de funcionarios que pasaron de manera directa de su función en el Estado a órganos contralores. En el primero de los casos está Fernando Simón, quien era senador peronista al momento de asumir en el cargo. En la Corte están los ministros Adaro, Gómez, Llorente y Garay, todos con pasado como funcionarios de algún partido político antes de asumir su rol como magistrados.

El conocido abogado mendocino es precandidato a diputado provincial en primer término por la lista que lleva a Omar de Marchi como precandidato a gobernador. "Me lo ofrecieron desde el Partido Demócrata y creo que está haciendo falta estar en una banca para este tipo de cosas que vengo diciendo", indicó.

Además, subrayó que "hay que matar a las listas sábanas: necesitamos la boleta única". Y se propuso trabajar en torno a "la ley de Ética Pública que tiene cosas incumplibles o que facilita que no sean cumplidas al cien por ciento".