Polémica

La ONU critica la falta de control en las escuchas telefónicas que se hacen en Argentina

Un relator especial del organismo consideró que se utilizan de manera excesiva y no sólo en delitos graves. Criticó la falta de control y la cadena de custodia que permite que documentos que deberían ser sólo de uso judicial terminen en los medios de comunicación.

miércoles, 5 de junio de 2019 · 15:45 hs

Un informe del relator especial para la Organización de Naciones Unidas, ONU, criticó la utilización de las escuchas telefónicas y la excesiva cantidad que se realizan en el país. 

Según publica La Nación, Joseph Cannataci visitó el país durante mayo, un tiempo antes que se conocieran los audios de la denominada operación "puf" y de la conversación de Lázaro Báez en la que reconocería que era testaferro de Néstor Kirchner.

Una de las principales críticas que se hacen sobre el tema es que, aunque se trata de intervenciones legales, no tienen por qué salir a la luz pública y conocerse a través de los medios de comunicación.

El relator de la ONU dice en su informe que en Argentina se pinchan unas 6.000 líneas por mes de las cuales son 69 en directo. El año pasado, de acuerdo al informe, se interceptaron unas 41.000 líneas en la oficina de escuchas de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado.

"Durante mi visita, he observado una falta general de confianza en los servicios de inteligencia de Argentina. Posiblemente debido a la historia reciente de Argentina, a una fuerte cultura de opacidad y a algunos casos de vigilancia ilegal muy publicitados, muchas personas en Argentina sospechan que están personalmente bajo vigilancia y que los agentes de inteligencia actúan sin supervisión ni vigilancia", escribió el representante de la ONU.

Una de las críticas apunta a la Comisión Bicameral de Fiscalización y Seguimiento de Organismos y Actividades de Inteligencia. De paso sugiere crear un organismo dedicado al control de estas tareas.

En el documento de la ONU Cannataci manifestó que "es insuficiente en la medida en que la Comisión no utiliza al máximo su capacidad jurídica ni posee los recursos para auditar a fondo el desarrollo de casos concretos, y tampoco tiene pleno acceso al contenido de cada expediente".

Desde la visión del organismo "el sistema de vigilancia de Argentina también tiene varias vulnerabilidades" y apunta al "uso excesivo de las interceptaciones, tratadas como una medida ordinaria de investigación para todos los tipos de delitos y no como el último recurso para los delitos graves".

A eso suma crítica a los los controles en la cadena de custodia sobre el acceso al contenido de las interceptaciones y la falta de un control independiente sobre el uso de las escuchas.