Diferencias internas

Los conflictos que sacuden a la coalición política que lidera Suarez

El gobernador impulsó la estatización de la empresa metalúrgica IMPSA, pero la medida generó una fuerte reacción del líder máximo del PRO, Omar de Marchi. Las razones ocultas de esta pelea y cuál puede ser su impacto en la coalición, de cara a los comicios.

Juan Carlos Albornoz
Juan Carlos Albornoz domingo, 6 de junio de 2021 · 06:55 hs
Los conflictos que sacuden a la coalición política que lidera Suarez
El gobernador Rodolfo Suarez recibió críticas por la estatización de IMPSA. Foto: Gobierno de Mendoza

Entre otras cuestiones, la estatización de IMPSA esta semana dejó a la vista un nivel de polémica importante dentro del oficialismo provincial.

Rodolfo Suarez destacó la medida, pero Omar de Marchi, líder máximo del PRO en Mendoza, fue muy crítico de la decisión.

De Marchi buscó dirigir los cuestionamientos más que nada contra el Gobierno nacional, pero no pudo (ni quiso) evitar que el fuego amigo hiriera a Suarez.

Alberto Fernández y Suarez habían acordado un salvataje económico de IMPSA que conduce, para el diputado nacional del PRO, al fracaso de la emblemática empresa metalúrgica y a más gastos de fondos estatales en el futuro para el sostenimiento de la firma.

La embestida en redes sociales de De Marchi contra la estatización de IMPSA dejó flotando algún interrogante sobre la solidez de la coalición política que integran el PRO y la UCR, en momentos que se aproxima otra elección. Sin embargo, el radicalismo minimizó el episodio y el propio legislador del PRO afirmó que esta disidencia con los radicales que gobiernan la provincia no representa, necesariamente, un quiebre que se vaya a reflejar en las urnas.

El plan A del ex intendente de Luján sigue siendo la permanencia en Cambia Mendoza, a pesar de sus diferencias puntuales con Suarez y el radicalismo. Pero también hay planes B y C. Las tensiones recientes hacen que no descarte la opción de "jugar por afuera" de la coalición gobernante.

Y hay quienes creen que De Marchi incluso podría declararse "prescindente" en la campaña para la elección legislativa de este año si no consigue un buen acuerdo electoral con los radicales.

Conscientes de que tienen más para perder que para ganar, en la UCR han decidido dejar pasar la disidencia de De Marchi sobre la estatización de IMPSA.

La UCR cree, además, que De Marchi reaccionó por razones ajenas a IMPSA y más cercanas a la rosca política de la coalición.

De hecho, el de la metalúrgica no fue el primer caso en el cual el lujanino criticó al Gobierno por una medida estatizadora.

Antes de IMPSA, De Marchi también se quejó de que Suarez haya armado una empresa estatal para el manejo de la mina Potasio Río Colorado (PRC), el proyecto para extraer sales de potasio en Malargüe que abandonó la empresa brasilera Vale.

Para el radicalismo, la reacción de De Marchi, en este caso, tuvo motivos particulares. Según comunicó el Poder Ejecutivo a fines de mayo, la PRC estatal tendrá como conductor al ex subsecretario de Energia, Emiliano Guiñazú. Pero en el staff también estará, con cargo de gerente, un ex asesor del senador Pablo Priore, Jerónimo Shantal.

Priore fue rival de De Marchi en las elecciones internas del PRO. El legislador se presentó a presidente del partido amarillo y buscó complicar el acceso a la conducción del elegido de De Marchi para el cargo: el diputado Álvaro Martínez

El delegado de De Marchi ganó al final la presidencia del PRO sin que hubiera elecciones (la Junta Electoral interna descalificó a la lista de Priore) , pero De Marchi siempre sospechó que Priore tuvo impulso radical para disputarle el control del PRO a su elegido.

Con el cargo en PRC para un asesor de Priore, De Marchi podría haber confirmado sus sospechas.

La UCR, de todos modos, intenta sepultar estos conflictos de cara a la elección legislativa que se viene.

Las encuestas le cantan al conjunto del oficialismo provincial un escenario favorable: ostenta alrededor del 50 por ciento de apoyo. El peronismo aparece estancado en el 30 por ciento y no aparecen figuras emergentes que puedan cambiar significativamente el panorama de la elección. 

El sentido común sugiere que en Cambia Mendoza no deberían haber rupturas. Pero la definición se conocerá recién cerca del 14 de julio, día en el que hay que presentar las alianzas electorales para las PASO a la Justicia Electoral.

El frente oficialista ya perdió "por derecha" el apoyo del PD orgánico, pero busca compensar este déficit con el PRO de De Marchi, los gansos disidentes que se agruparon en el Partido Demócrata Progresista y los seguidores locales de Ricardo López Murphy (Recrear). Dentro de poco más de un mes si sabrá si todos siguen juntos, o no.

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