Preocupación por la designación de Guillermo Carmona como secretario de Malvinas
En las Fuerzas Armadas consideran que su nombramiento en la Cancillería, en el lugar que ocupaba Daniel Filmus, es una señal de endurecimiento en la disputa con Gran Bretaña
El exdiputado kirchnerista Guillermo Carmona, que reemplazó a Daniel Filmus como secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur en la Cancillería, ya comenzó a generar polémica al participar de un homenaje al Operativo Cóndor, la acción llevada a cabo por un grupo de jóvenes armados que en septiembre de 1966 secuestró un avión de Aerolíneas Argentinas y lo hizo aterrizar en las islas Malvinas, donde fueron izadas siete banderas celestes y blancas.
Su presencia en el Museo Malvinas, cuando el país se encamina al 40° aniversario de la guerra de 1982, fue vista con preocupación en sectores políticos y militares al considerar que es una señal del endurecimiento de la posición que asumirá el gobierno de Alberto Fernández para insistir en los reclamos por la soberanía sobre las Malvinas.
Según consigna La Nación, se cree que Carmona mostrará diferencias con la gestión de Filmus, considerada en algunos ámbitos como de "tolerancia extrema" en el conflicto con el Reino Unido.
Carmona viene de presidir el Instituto de Ayuda Financiera (IAF) del Ministerio de Defensa, donde tenía a su cargo el pago de retiros y pensiones militares. Allí formó vínculos con asociaciones de veteranos de Malvinas, que celebraron su designación.
Crítico de los acuerdos con Gran Bretaña y la Cruz Roja Internacional para la identificación de los soldados argentinos caídos en las islas, Carmona se opuso incluso a la postulación del exmilitar británico Geoffrey Cardozo y el excombatiente argentino Julio Aro al premio Nobel de la Paz. Su posición se encuadra en el fuerte rechazo a las iniciativas de diálogo y cooperación en torno del conflicto del Atlántico Sur.
En las Fuerzas Armadas no cayó nada bien la designación del funcionario kirchnerista, a quien definen como "representante del nacionalismo más extremo". "No sumará nada y restará mucho en el proceso de reconciliación definitiva", auguraron en las fuerzas.
En la Armada no tienen un buen recuerdo de la participación de Carmona en las audiencias de la comisión bicameral investigadora del hundimiento del submarino ARA San Juan. Consideran que fue particularmente agresivo hacia los oficiales navales y les preocupa que no sea una persona "abierta al diálogo".