Coronavirus en Argentina

Economía de guerra: ajuste, dependencia y temores

La economía está frenada y temen que se transforme en un problema estructural. Qué alternativas analizan para enfrentar la crisis.

MDZ Política
MDZ Política viernes, 3 de abril de 2020 · 14:00 hs
Economía de guerra: ajuste, dependencia y temores
Foto: ALF PONCE / MDZ

¿Cuánto sale una camisa manga larga? No hay respuesta, porque no hay comercialización. Es decir, no hay quién pueda venderlo, quién quiera comprarlo; no hay precio. Un ejemplo simple de los miles que podría haber con una economía bloqueada. El problema son las consecuencias económicas y sociales. Las mediciones de pobreza, por ejemplo podrían ser aún más dramáticas para los próximos trimestres por la pérdida de empleo.

El problema es para la mayoría de las empresas, comercios, emprendimientos, profesionales y personas que tienen oficios que, de golpe, dejaron de tener ingresos. Las consecuencias económicas para las familias del parate en la economía se sienten pero se solapa con la delicada situación que ya vivía Argentina y por eso temen que pase a ser una crisis estructural. 

El Estado provincial, como le ocurre a todos, va camino a tener una recaudación testimonial en los impuestos más importantes para las arcas públicas, como Ingresos Brutos, Sellos y regalías. Por eso analizan alternativas, aunque con herramientas acotadas. 

Coparticipación 

Las provincias reclamaron medidas de urgencia a la Nación que están en análisis. Una de ellas es "compartir" la emisión de dinero. En concreto el pedido es que la Nación desate la coparticipación a la recaudación y que transfiera a las provincias la misma cantidad de dinero que el año pasado. Como los recursos no están, se haría con emisión monetaria. Eso garantizaría a las provincias un piso de recursos para funcionar. En Mendoza, por ejemplo, la mitad de los recursos dependen de la Nación y aún antes de la crisis ya habían caído.

El temor es cómo se distribuyen los recursos y por eso las provincias opositoras piden que se respeten los criterios de la coparticipación y transferencias automáticas

Ajuste 

El gasto público de Mendoza se había ajustado, pero se profundizará. La obra pública ya está frenada pero la caída trascenderá la cuarentena. Se modificarán partidas para asistir la emergencia, pues hay gastos nuevos que cubrir: la logística para equipar los hospitales de campaña, el equipamiento para reforzar la atención y hasta el alquiler de hoteles para que quienes lleguen desde afuera cumplan la cuarentena. 

El presupuesto provincial es inelástico a la baja porque la mayoría está destinado a sueldos. El recorte de salarios de algunos funcionarios tiene un peso testimonial en el Presupuesto general. En total fueron 201 los funcionarios del Ejecutivo alcanzados y fue solo por un mes el recorte. En el Gobierno analizan cómo mantener esa medida, para al menos dar un gesto. Lo que no se tocó es el bolsón de gasto del ecosistema político. Es decir, se bajaron los salarios de los legisladores, pero no los recursos que los rodean.

Incluso si hicieran un recorte de salarios generales, tampoco tendría impacto. Las áreas que son intangibles por la crisis sanitaria, como el ministerio de Salud y el de Seguridad, son algunas de las que tienen salarios más altos. Y en volumen es la DGE la que tiene más cantidad, pero con salarios bajos. El costo político de una restricción salarial general sería mucho mayor que el beneficio económico para las cuentas públicas. El ajuste implícito está ocurriendo de hecho con los salarios congelados desde diciembre. Las paritarias están suspendidas y no habrá aumentos.

Bonos

La última alternativa que se podría ejecutar es la emisión de cuasimonendas, de bonos provinciales. Esa emisión sería respaldada con dos tipos de garantías. O recursos federales a cobrar en el futuro, o recursos provinciales tangibles, pero también a futuro, como las regalías petroleras. 

Mendoza tiene una experiencia en ese sentido, cuando en 2002 se emitieron los Petrom. Pero el escenario es distinto y así lo entienden en el Gobierno. Sin embargo, preparan las herramientas para, llegado el caso, ejecutarla.