Cada casa puede ser un casino en Mendoza
El diputado Mario Vadillo alerta sobre las consecuencias que puede tener la habilitación del juego online en la Provincia. El Gobierno lo impulsa.
Por Mario Vadillo/ Diputado provincial
Cuando creemos que las cosas no pueden ir más lejos, nos encontramos con un proyecto que nada tiene que ver con la situación en la que vivimos y por la que estamos urgidos.
En este contexto de pandemia y de urgencia sanitaria, el oficialismo provincial buscará mañana darle sanción en la cámara de Diputados a un proyecto de ley que autoriza el juego online de casino en la provincia de Mendoza, que ya cuenta con media sanción en senadores. Y como no solo creemos que no es el momento adecuado cuando hay cosas más importantes por atender, es que desde Ciudadanos por Mendoza adelantamos nuestro rechazo.
Autorizar el juego es perjudicial para la salud y un enorme negociado para el gobierno de turno.
En plena crisis, con gravísimos problemas sanitarios, económicos y sociales, la legislatura debería estar debatiendo temas del colapso hospitalarios donde: faltan camas de UTI, insumos y pago de sueldos a los profesionales de la salud. No se están tratando los problemas gravísimos del colapso del sistema económico en todas las actividades, ni hablar de los sectores directamente cerrados hace meses como el turismo, actividades recreativas y artísticas. Menos aún se ha puesto en debate la deserción escolar de miles niños, niñas y adolescentes que no han podido tener su ciclo educativo por no tener acceso a la conectividad y a los recursos necesarios. Sin embargo hay tiempo y apuro, para esta ley, para que Mendoza legalice las apuestas online. La situación económica y social en el territorio provincial demanda la especial atención en los barrios más pobres, que tengan políticas públicas que promuevan el desarrollo integral de los jóvenes y de la familiar, y que no se convierta cada casa en un casino.
Un celular, un casino: las nuevas apuestas virtuales
Uno de los mayores problemas que tienen los actuales casinos es que sus jugadores son mayoritariamente personas grandes y no han podido tener una oferta tentadora para la juventud. No obstante, rápidamente se han dado cuenta que las fichas tenían que ser puesta en los dedos de los jóvenes, un celular un casino, así es la premura que se pueda legalizar y llegar a este gran nicho de mercado.
La juventud es seducida con juegos de cartas donde su pericia puede ser un éxito económico, o con apuestas a sus conocimientos o intuiciones deportivas o tratando de lograr un rédito económico ante la falta de trabajo, venciendo las decepciones, angustias y fracasos por la falta de oportunidades.
La bancarización obligatoria en los programas sociales como el IFE, AUH, jubilaciones y pensiones, como las cuentas sueldo va a ser blanco fácil de tener acceso inmediato al juego online. Por lo que se hacen transferencias directas de una cuenta social a una cuenta financiera que normalmente opera en paraísos fiscales y es dinero que se va de la provincia y del país.
Argumentos sin argumentación.
Se argumenta desde el Gobierno que este negocio ya existe en la clandestinidad lo que imposibilita su control, regulación y por sobre todo que se pueda cobrar impuestos. Sobre el particular tenemos que poner en paralelismo que la pornografía infantil ha logrado prohibirse en internet con gran logro dado que se la ha sumergido a la internet profunda, donde los motores de búsqueda no indexan ni puede tener alojamiento oficial y demás protecciones. Cuando habilitamos el juego online, los usuarios de las redes sociales son específicamente bombardeados de publicidades especialmente diseñadas para sus perfiles especialmente construidos con sus bases de datos, por lo que los hacen más lábiles a tener en su mano el casino en todo momento.
El argumento escuchado una y otra vez de los beneficios económicos de hacer tributar a estas empresas, es desconocer el principio básico del juego de casino, donde las premios son puestos por el propio dinero de los jugadores y la banca saca su porcentaje, por lo que crear juego online, solo se beneficia las empresas y el gobierno de sacarle plata a los ludópatas que destruyen sus fuentes de trabajo, crédito y todas sus relaciones familiares. El gobierno miente cuando dice que no crea impuestos, lo crea y muy gravemente sobre el patrimonio de los ciudadanos.
Es sorprendente que la administración anterior del Gobernado Cornejo empezara a cerrar los casinos, por ser una enfermedad en las localidades que eran desbastadas en sus economías por el juego, y que este gobierno de rienda suelda a un juego aún de mayor alcance dado que en cada casa se vuelve un casino.
Licitación ilícita
La decisión de habilitar a los mismos dueños de los casinos de Mendoza, dado que se ha realizado una enmienda a esta Cámara para que la licitación tenga direccionamiento a los licenciatarios actuales, lo que ya supone dar una preferencia normativa, que asegura un rédito económico (de miles de millones) sin ninguna contraprestación que lo justifique que viola el principio de igualdad, máxima concurrencia y competitividad que debe tener una licitación pública. Acá el principio de compre mendocino, no tiene ninguna lógica, por cierto.
Para finalizar debemos hacernos esta pregunta, si el legislador debe pensar con el criterio rector de un buen padre de familia, permitiría que sus hijos tengan una cuenta online para juegos de casino, seguramente que no, nadie quiere tener un hijo jugador.