Las Abuelas de Plaza de Mayo anunciaron la restitución de la nieta 105
Las Abuelas anunciaron hoy la restitución de la identidad de la nieta 105 recuperada, hija de un matrimonio secuestrado en agosto de 1977 en el oeste del Gran Buenos Aires. La mujer que recuperó su identidad nació durante el cautiverio de su madre en la ESMA.
Los padres de Laura, Susana Siver y Marcelo Reinhold, fueron secuestrados el 14 de agosto de 1977 en Haedo.
Estela de Carlotto, titular de Abuelas de Plaza de Mayo, confirmó la restitución de Laura Reinhold Siver, la nieta número 105. "Fue Laura la que se acercó a Abuelas", dijo Carlotto, y destacó que las restituciones "son posibles por la cooperación entre nuestra organización, los sobrevivientes de los centros clandestinos y el Estado".
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"Felizmente, Laura, que siempre tuvo dudas sobre su identidad, accedió a realizarse voluntariamente los análisis de ADN en el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) en junio de este año, a través de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi)", relató Carlotto.
El martes, "el BNDG informó a la Conadi que la joven incluye en un 99% en la familia Reinhold-Silver", reveló la titular de Abuelas en la rueda de prensa que ofreció junto a familiares de Laura, sobrevivientes, miembros de organismos de derechos y el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde.
Los padres de Laura, Susana Siver y Marcelo Reinhold, fueron secuestrados el 14 de agosto de 1977 en Haedo, oeste del Gran Buenos Aires, y llevados a la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).
Según testimonios, Susana, que en el momento del secuestro llevaba unos cuatro meses de embarazo, dio a luz en cautiverio en febrero de 1978 en el Hospital Naval, donde le practicaron una cesárea.
La hija de los desaparecidos Marcelo y Susana fue inscripta después como propia por un matrimonio de civiles que la crio pero "nunca se acercó a Abuelas", a diferencia de Laura, respaldada en cambio por su esposo, dijo Carlotto.
La hija de los desaparecidos Marcelo y Susana fue inscripta después como propia por un matrimonio de civiles que la crio pero "nunca se acercó a Abuelas", a diferencia de Laura, respaldada en cambio por su esposo, dijo Carlotto.

