Lectores de MDZ rechazan una reforma que facilite la reelección
En Mendoza no existe la posibilidad de que los gobernadores sean reelegidos, pero sí la tienen intendentes, concejale y legisladores. Nuestros lectores rechazaron la idea de que incluya la reelección de quienes ocupen el cargo de gobernador.
El gobierno de la provincia arrancó el año imponiendo en la agenda de la opinión pública la presunta necesidad de reformar la Constitución.
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Durante el fin de semana, desde las oficinas de Casa de Gobierno se filtró a algunos medios la intención de la administración de Celso Jaque. Señalaron primero que se buscaba avanzar en la reelección del gobernador, pero al día siguiente se aclaró que, en realidad, lo que se busca es una reforma integral.
MDZ llevó la consulta sobre el particular a sus lectores, quienes, en la encuesta del día de este lunes, rechazaron de plano la posibilidad de establecer la reelección de gobernador.
De un total de 2624 votantes que participaron de la encuesta, el 83 por ciento se manifestó en desacuerdo con la reelección de los mandatarios locales, mientras que el restante 17 por ciento (444 personas) dijo estar de acuerdo.
Hasta ahora, Mendoza es una de las pocas provincias argentinas que tiene imposibilitada constitucionalmente la reelección del gobernador. Esto es señalado por muchos como una garantía de institucionalidad. Y de hecho, uno de los debates pendientes es, precisamente, el del establecimiento (o no) de límites a los cargos que sí poseen la posibilidad de reelección indefinida, como concejales, intendentes y legisladores.
La fiebre reeleccionista muchas veces ha terminado con la muerte política de quien la padeció. Así ocurrió en Misiones, en donde el ex gobernador Carlos Rovira dio una batalla en las urnas por su propia reelección y la perdió ante un frente encabezado por el obispo Joaquín Piña.
Rovira ya había logrado reelegirse una vez e iba por más. No sólo perdió el referendo constitucional, sino que, además, el radicalismo le arrebató la provincia.
Tucumán se encamina hacia el proceso de habilitar para un tercer mandato a su gobernador, José Alperovich, un ex radical converso al peronismo que, en las últimas elecciones, logró un fuerte respaldo popular. Pero su capital político (y el de su esposa Betty, diputada nacional, con quien comparte el escenario político) lo está rifando por la ambición de perpetuarse en el cargo.
Mientras tanto, un viejo amigo de Celso Jaque, el gobernador chubutense Mario Das Neves logró su reelección una vez. Ahora que con el prelanzamiento de Carlos Reutemann vio traicionada la promesa kirchnerista de impulsarlo a la presidencia de la Nación, explora quedarse –reforma constitucional mendiante- al frente del gobierno de Chubut.
Otras provincias como Neuquén (Sapag), Corrientes (Romero Feris); San Luis (Rodríguez Saá) y Santiago (Juárez) han logrado construir, durante décadas hegemnías feudales de la mano de constituciones permisivas. La mayoría de ellos ya no está en el poder, el que debieron dejar luego de procesos muy traumáticos.
La fiebre reeleccionista muchas veces ha terminado con la muerte política de quien la padeció. Así ocurrió en Misiones, en donde el ex gobernador Carlos Rovira dio una batalla en las urnas por su propia reelección y la perdió ante un frente encabezado por el obispo Joaquín Piña.
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Otras provincias como Neuquén (Sapag), Corrientes (Romero Feris); San Luis (Rodríguez Saá) y Santiago (Juárez) han logrado construir, durante décadas hegemnías feudales de la mano de constituciones permisivas. La mayoría de ellos ya no está en el poder, el que debieron dejar luego de procesos muy traumáticos.
