Carrió y la UCR ahora van por Cobos para sumarlo al frente opositor
(NA)- Superada la cautela inicial, la alianza que mantienen la UCR y la Coalición Cívica dio en este arranque de año muestras de buena salud y se embarcará ahora en una ambiciosa tarea de unificar a la oposición en todos los distritos del país, para lo que avanzará en un acuerdo con Julio Cobos pero con límites en el peronismo disidente.
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La tradicional ciudad de Mar del Plata fue testigo de los primeros pasos de este nuevo frente electoral hacia los comicios legislativos del octubre: Morales reconoció que iniciará personalmente negociaciones con el vicepresidente y Carrió confirmó que su plan es fortalecer los liderazgos de la oposición en las principales provincias, aunque eso signifique "acompañar" y no "liderar" las listas.
El radical Ernesto Sanz en Mendoza, el ex kirchnerista Luis Juez en Córdoba y el socialista Rubén Giustiniani en Santa Fe serán las cabezas de esta confluencia en los distritos más importantes, en una elección que marcará un decisivo desafío para la oposición como paso previo a las presidenciales de 2011.
En paralelo, y a través de dirigentes radicales, esta fuerza que también integra el socialismo profundizará el diálogo con el Consenso Federal (ConFe) de Cobos a fin de sumarlo en distritos
donde tenga representación para enfrentar al PJ, aunque descartan por el momento avalar acuerdos "partido a partido" con quienes se fueron de la UCR.
Pero, además, la idea de Carrió y Morales es expandir esta alianza e incluir a dirigentes sin fuerte estructura propia pero que puedan ayudar a sumar votos en octubre, siempre que no se
trate de un "rejuntado" -como señalan- y que no alteren la composición del núcleo central de esta fuerza tripartita.
Entre ellos se encuentran dirigentes de la Mesa de Enlace del agro, como Eduardo Buzzi y Mario Llambías, así como el ruralista entrerriano Alfredo De Angeli y el ex ministro Ricardo López
Murphy, cuya integración es resistida sin embargo por el socialismo que dirige Rubén Giustiniani.
De esta forma, este frente opositor busca marcar la cancha y concentrar la adhesión del electorado no peronista, lo que implica dejar afuera a sectores del justicialismo crítico encabezado por Felipe Solá y Francisco De Narváez, al que pasaron a llamar no inocentemente "oficialismo disidente".
Curiosamente, este fin de semana, "La Feliz" recibió al cuarto y último integrante de esta "gran familia radical" dispersa: el vicepresidente Cobos, que presenció un concierto en el Hotel Costa
Galana, pero no posó -todavía- para la foto de reconciliación con Morales.
Una de las tareas que tiene por delante esta nueva alianza es lograr bajar aún más la verborragia de Carrió, que molesta al PS e incluso a la UCR, y especialmente las críticas de la bonaerense Margarita Stolbizer hacia dentro del centenario partido: precisamente se reunirá esta semana con Morales y el titular de la UCR provincial, Daniel Salvador, para definir un acuerdo en la provincia, donde también estará el cobismo.

