Molestia en el PJ por el acercamiento de Cornejo y Jaque
El senador peronista Daniel Cassia dijo que teme que el ministro de Seguridad intente negociar con el gobernador electo una salida tranquila de la cartera. A su vez, parte de la tropa de Jaque está molesta por el "personalismo" del malargüino.

Alfredo Cornejo invitó a Celso Jaque para este jueves a una reunión privada y generó un inesperado conflicto en la propia tropa política del gobernador electo.
Te Podría Interesar
El ministro de Seguridad tomó esta decisión luego de que los justicialistas amenazaran con reclamarle una “rendición de cuentas” sobre diversos aspectos de la cartera. Pero la propuesta, aceptada por Jaque, despertó reacciones inesperadas entre sus consejeros políticos.
La reacción más explícita fue la del senador Daniel Cassia, principal referente de los peronistas en la pelea contra el delito. Cassia envió en las últimas horas una dura carta a todos los medios en la que blanqueó y puntualizó sus cuestionamientos a los manejos de Cornejo en el ministerio.
¿Por qué tomó esta postura? Cassia indicó que teme que Cornejo intente “negociar algo” con Jaque para salir del ministerio sin manchas y que la transición se desarrolle en paz. Por ello, decidió marcar su posición de cara a la opinión pública.
Pero está claro que, aunque el legislador no lo diga, la carta de Cassia también es un cuestionamiento para Jaque. Por un lado, si existe una negociación entre el oficialismo y el PJ, el gobernador electo sería partícipe, lo cual daña su imagen. Pero por otro lado, la reacción de Cassia parece reflejar la inquietud de los colaboradores de Jaque respecto de su “personalismo” en la toma de decisiones.
Hace varios días que se viene calentando el caldo para una posible rebelión. Es que Jaque ha mandado una comisión de legisladores peronistas para que revise las diversas áreas del gobierno, pero ninguno de ellos sabe qué ganará con la realización de esta tarea.
El misterio acerca de los miembros del gabinete de ministros es toda una prueba. “De eso no nos da ningún tipo de información, lo único que nos da es tarea para hacer”, admitió días atrás uno de los enviados del malargüino.
En este escenario, Cassia es una de las figuras expectantes de cara a la designación del nuevo ministro de Seguridad.
Transición ruidosa
La carta abierta de Cassia tiene destino de polémica. El senador indica que, en una reunión que mantuvo con Cornejo hace menos de siete días, el ministro entregó un informe sobre el personal y otras cuestiones operativas de Seguridad que “muestra indicios de un importante desorden y carencia de controles”.
Como conclusión, Cassia advierte las falencias detectadas: incumplimientos de procesos licitatorios (hace hincapié en las fallas y demoras del sistema de comunicación TETRA); falta de controles en los movimientos de fondos; partidas presupuestarias para personal que “no se corresponden con los cargos ocupados”; contratos que no se corresponden con la función del contratado; partidas presupuestarias excedidas de gasto (por ejemplo, en publicidad); pagos por compra directa sin respetar la Ley de Contabilidad; inexistencia de un inventario sobre los bienes del ministerio (incluidas armas y otros elementos de seguridad) y falta de un control de costos de las unidades operativas.
Incluso, al final de la carta, Cassia plantea públicamente varias sugerencias para el gobernador electo. Entre ellas, bajar el número de civiles del ministerio de Seguridad, mejorar el control de la gestión y exigir que Cornejo de pruebas de haber cumplido con las normativas de contabilidad y del Tribunal de Cuentas antes de dejar la cartera.
Hace varios días que se viene calentando el caldo para una posible rebelión. Es que Jaque ha mandado una comisión de legisladores peronistas para que revise las diversas áreas del gobierno, pero ninguno de ellos sabe qué ganará con la realización de esta tarea.
El misterio acerca de los miembros del gabinete de ministros es toda una prueba. “De eso no nos da ningún tipo de información, lo único que nos da es tarea para hacer”, admitió días atrás uno de los enviados del malargüino.
En este escenario, Cassia es una de las figuras expectantes de cara a la designación del nuevo ministro de Seguridad.
Transición ruidosa
La carta abierta de Cassia tiene destino de polémica. El senador indica que, en una reunión que mantuvo con Cornejo hace menos de siete días, el ministro entregó un informe sobre el personal y otras cuestiones operativas de Seguridad que “muestra indicios de un importante desorden y carencia de controles”.
Como conclusión, Cassia advierte las falencias detectadas: incumplimientos de procesos licitatorios (hace hincapié en las fallas y demoras del sistema de comunicación TETRA); falta de controles en los movimientos de fondos; partidas presupuestarias para personal que “no se corresponden con los cargos ocupados”; contratos que no se corresponden con la función del contratado; partidas presupuestarias excedidas de gasto (por ejemplo, en publicidad); pagos por compra directa sin respetar la Ley de Contabilidad; inexistencia de un inventario sobre los bienes del ministerio (incluidas armas y otros elementos de seguridad) y falta de un control de costos de las unidades operativas.
Incluso, al final de la carta, Cassia plantea públicamente varias sugerencias para el gobernador electo. Entre ellas, bajar el número de civiles del ministerio de Seguridad, mejorar el control de la gestión y exigir que Cornejo de pruebas de haber cumplido con las normativas de contabilidad y del Tribunal de Cuentas antes de dejar la cartera.