#Wok

Los que encienden la mecha de los usuarios combustibles

En el #Wok de hoy: los aumentos -de todo y para todo- no dan respiro + Como el boxeador grogui, los consumidores no reaccionamos + Informarse, reclamar, participar, son formas de cambiar esa lógica unidireccional + Casos como el cuestionado MendoTran muestran que la reacción de los usuarios puede ayudar a corregir un rumbo equivocado

sábado, 23 de febrero de 2019 · 13:25 hs

* Maridaje / Musicaliza esta columna "Ferris Wheel", por Gabor Szabo

La sucesión de aumentos en todo, literalmente, no da respiro. El bombardeo de anuncios es constante: gas, luz, agua, prepagas, cuotas de colegios y universidades, combustibles, transporte, telefonía, uf... hay más, mucho más, pero paremos aquí. Números, porcentajes, cifras que llegado cierto punto nos hacen perder el contexto. Insomnes, ya casi sin reflejos, recibimos las boletas o entramos en el home banking y como dóciles consumidores/usuarios/clientes pagamos sin chistar. En el mejor de los casos, claro.

Pero como ocurre con esa letra chica que está ahí precisamente para que pasemos de largo y no reaccionemos, también pagamos de más por no revisar, no sacar cuentas, no comparar con la boleta anterior; en definitiva, por no informarnos debidamente si es correcto lo que nos están cobrando. Se trata de repetir lo que sí solemos hacer en el súper: chequear si el precio de la góndola coincide con lo que figura después en el ticket. Más de una agradable sorpresa surge por ser precavidos y evitar pasar de largo.

Sobre todo cuando la crisis es la que marca el paso, vale tomar en cuenta el consejo de quienes trabajan en organismos de defensa al consumidor o en ong que protegen los derechos de los ciudadanos. Educar al consumidor permite tomar mejores decisiones, sostienen, pero esto también supone una actitud proactiva de parte del vapuleado consumidor. No se puede esperar que nos golpeen la puerta para darnos los tips básicos para reaccionar frente a empresas y comercios que tienen todas las intenciones de vacunarnos.

"Los usuarios tenemos que educarnos, saber que podemos y debemos reclamar. Hay que ponerle límites a los abusos de algunas empresas de servicios; generar conciencia de la importancia que tiene la participación ciudadana. La verdad que hoy los usuarios la estamos pasando muy mal", recomienda Romina Ríos, de la ong Protectora.

En esa línea de patalear pero preparados, Defensa del Consumidor de la provincia le dedica un importante capítulo a la Educación en Consumo. A través de cursos online gratuitos, esta dirección promueve la participación de los ciudadanos para que conozcan sus derechos y responsabilidades como usuarios y consumidores. Algo así como "quejate, pero con argumentos".

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De planchadas a eyectadas

Casi el 40% de un sueldo promedio se destina hoy a pagar las cuentas; léase tarifas de agua, gas y luz, alquiler, expensas, servicios de telefonía y transporte público.

Para mensurar el impacto de las tarifas en el bolsillo de la mayoría, un informe de la Universidad Nacional de Avellaneda reveló que en 2015 el promedio de una canasta de servicios públicos rondaba el 6% del salario mínimo, mientras que el año pasado este porcentaje trepó al 21%.

“Las tarifas estaban planchadas desde la gestión anterior y son un problema económico de magnitud, por eso era muy necesario actualizarlas. Pero también es cierto que se debería haber tenido en cuenta el ingreso de las familias al inicio del esquema”, analiza en criollo básico Alejandro Einstoss, director académico del Centro de Estudio de la Regulación Económica de los Servicios Públicos (CERES).

Si se compara a Argentina con otros países de la región, pasó de estar última en 2015 (con 6%) al 3º puesto en el 2018, ubicado detrás de Venezuela (33%) y Chile (23%), según datos de Chequeado.

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Clientes (in)satisfechos

En el medio de este campo minado, Ecogas aportó su chispa pidiendo un aumento del 41% para las boletas del período abril-septiembre. El argumento para tamaña suba es, según la distribuidora, que en el último período el aumento que aplicó fue menor al que correspondía. Razón por la que reclama ahora una compensación que implica un aumento superior al estipulado (30%). Cual yuyo seco ante el paso del Zonda, los usuarios se encendieron al conocerse el planteo de Ecogas y así lo expresaron duramente a través de los medios y las redes sociales.

La lógica empresarial limita su análisis a sus costos, tampoco le pidamos sensibilidad social ni que repare en los daños colaterales. Mientras los sueldos siguen estancados, las tarifas van en franco ascenso y no se vislumbra la posibilidad cierta de achicar la brecha.

También es cierto que la reacción del ciudadano de a pie no se limita al impacto de su bolsillo. A mano está el ejemplo de la implementación del nuevo sistema de servicio público de pasajeros, MendoTran para ir al grano, que desde el vamos tuvo los mil y un problemas. Corregirlos (aunque todavía falta bastante) ha sido posible gracias a la reacción activa de los pasajeros, quienes con sus reclamos, críticas y aportes posibilitaron que el elefante se mueva. A través de las más variadas vías, incluso con reuniones entre legisladores, estudiantes, vecinos, organizaciones, referentes barriales, funcionarios y técnicos, los usuarias plantearon todo tipo de observaciones -y soluciones- para mejorar el servicio.

Como con la queja no alcanza y fuego es lo que sobra en este escenario de usuarios combustibles, el empoderamiento del consumidor resulta imprescindible para que menguar la lluvia de piñas económicas. Las leyes que nos protegen, los mecanismos de reclamo, los pasos a seguir en determinados casos, están ahí a un solo clic. Actuar, pero informados.

Hoy se puede googlear y acceder fácilmente a esta información, pero lo fundamental es qué hacer después con ella. Aunque no alcance para que las cuentas cierren o que las cosas funcionen como corresponde, involucrarse evita que otros actúen impunemente. Por extensión, esto vale para gobernantes y representantes varios. También en las urnas se expresan los clientes insatisfechos.

#Solapa

Historias de espías (y espiados), de Franco Lindner (Planeta, 400 páginas, $599)

El nuevo libro de Linder responde con contundencia los grandes enigmas del submundo de la Inteligencia de los últimos veinte años. Escrito en tono de thriller y lleno de revelaciones impactantes, por las páginas de este libro desfilan los personajes más controvertidos e inasibles del espionaje argentino, que brindan su testimonio por primera vez. Pero también sus víctimas, dirigentes de primera línea, hablan de lo que es vivir bajo permanente vigilancia. Franco Lindner, editor de la revista Noticias, logra un relato atrapante y documentado sobre uno de los mayores males nacionales: los servicios de Inteligencia heredados de la última dictadura y reconvertidos en tutores de un sistema corrupto que se traga a quienes pretenden combatirlo.

#ElResaltador

Discuta, por favor

"Para vivir en sociedad se necesita consenso, pero no deberíamos abstenernos de discrepar por miedo a ofender o a ser rechazados. A veces caemos en la autocensura: renunciamos a decir lo que los demás no quieren oír, porque nos reconforta sentir que remamos en la misma dirección que todos. Al fin y al cabo, casi nadie desea que los otros lo perciban como la nota discordante. Pero sin disensión llegaríamos a un punto de estancamiento... Como dijo el filósofo Eric Hoffer, el principio del pensamiento se halla en el desacuerdo no solo con los demás, sino también con nosotros mismos. No se trata tanto de provocar el debate como que, cuando surja, lo aceptemos. A la larga, todos salimos ganando".

[ Marta Rebón, escritora y traductora española, en su columna en El País Semanal ]

#LaDataFlora

  • Por octavo mes consecutivo, la encuesta que realiza la consultora Gustavo Córdoba & Asociados sitúa en febrero a la Inflación al tope de las preocupaciones de los argentinos. Endeudamiento y corrupción completan el podio.

  • A dos años y medio de su lanzamiento, la semana pasada se llegó a los 10 millones de expedientes creados de manera electrónica en la Administración Pública Nacional, según datos de la Secretaría de Gobierno de Modernización de la Nación.

#ALaCabeza

Cómo eliminar la corrupción estructural se titula la charla del periodista Hugo Alconada Mon en el TEDxRíoDeLaPlata. El autor de La raíz (de todos los males) explica aquí qué aprendió acerca de cómo resolver el problema de la corrupción estructural mientras investigaba a los más poderosos de la Argentina.