Opinión

¿Sabés si tu casa es segura a la hora de enfrentar un terremoto?

El común de los mortales cuando pensamos en una casa o un departamento buscamos un lugar lindo y acogedor. Algunos se fijan en algunas cuestiones de seguridad, pero cuántos están pensando en un hogar seguro para enfrentar terremotos

domingo, 21 de julio de 2019 · 10:24 hs

La vivienda que habitamos es mucho más que el espacio físico. Es el lugar en el que encontramos seguridad y también el confort para el descanso y el desarrollo. Pero generalmente cuando alquilamos o compramos una casa o departamento nos preocupamos de muchas cuestiones más estéticas que de seguridad. Por eso, al analizar cómo elige un departamento un experto en sismos y terremotos llama la atención el tiempo que se toma y las cosas en las que se fija.

En las lecturas habituales de medios de diferentes lugares me encontré con una reportaje a Galo Valdebenito, doctor en ingeniería sísmica chileno que contó en el diario Las Últimas Noticias cómo eligió su nuevo departamento. Su caso tiene varias particularidades, porque se trata de un especialista en el tema que vive en un país altamente sísmico y que compró la vivienda en la ciudad de Valdivia, en el sur del vecino país. Fue en ese lugar donde ocurrió el terremoto más grande registrado en la historia de la humanidad y que alcanzó los 9.5° en 1960.

Acá algunos de los puntos en los que se fijó el especialista:

Lo primero en lo que me fijé es el suelo. Hay que poner ojo en los suelos que están a orillas de ríos y cerca del mar porque tienden a ser más licuables. Siempre hay que preguntar sobre qué tipo de suelo se construyó el edificio.

Hay que preguntar si el edificio tiene fundaciones superficiales o profundas. Factor importante para saber la capacidad de soporte del edificio. Si son profundas es porque tienen pilares subterráneos de concreto que dan más seguridad.

Si el edificio se acerca (la forma) a un cuadrado o un rectángulo no tan alargado, resistirá mejor. Es importante que los muros lleguen hasta arriba y no se interrumpan en algún piso por diseño de la estructura.

El edificio donde compré es bastante cuadrado y sólo tiene seis pisos. Quizás no es innovador, pero así disminuyo el riesgo y no es feo.

Un edificio como un tallarín no es malo, pero es flexible y en los pisos superiores el terremoto se siente de una manera terrible. Se suma el movimiento del sismo más el movimiento relativo respecto al suelo. Es como un efecto látigo.

Su caja es la columna vertebral de la construcción. Si se cae una casa lo único que queda en pie es la chimenea porque ese núcleo es muy rígido. Lo mismo pasa con el ascensor, es lo más resistente. Cuando ponen la caja del ascensor en una de las esquinas tiende a aumentar la posibilidad de que cuando haya un sismo se genere un efecto de torsión en la planta del edificio.