Alfredo Cornejo

En shock, la Provincia prende velas al turismo extranjero

Con regalías impactadas por el congelamiento de los combustibles y recortes en coparticipación por alimentos básicos sin IVA, la llegada de visitantes tentados por la devaluación asoma como potencial alivio para la economía local.

miércoles, 21 de agosto de 2019 · 09:24 hs

Como cada tanto, la realidad nacional volvió por estos días a llevarse puestas a las provincias con devaluación y medidas fiscales a las cuales Mendoza no será ajena.

En nuestra provincia al golpe de mercado sobre el dólar le siguió el martillo de Mauricio Macri al decretar el congelamiento del precio de los combustibles, cuadro que completó con la eliminación del IVA a productos básicos.

La devaluación de un 30% del peso dispara la abultada deuda que Mendoza tiene en dólares, que comenzó con la gestión anterior y continuó con la actual. Cada peso que se encarece la divisa golpea directamente en las arcas provinciales, por lo que habrá que esperar ahora a que pase la turbulencia para ver dónde aterriza finalmente el billete verde. Eso sí: la barrera de los $55 parece haber llegado para quedarse como piso.

En el caso de los combustibles, el congelamiento de tarifas acompañará el de las regalías. Como publicó días atrás MDZ, la Provincia perdería más de 5millones de dólares ó $360 millones por una cotización estancada en $45 y no en torno a los $60, como indica la realidad.

Además, en el caso de la decisión sobre las naftas, la Casa Rosada no tiene el beneficio de la duda como en el caso de la devaluación, que Macri atribuyó en persona a quienes votaron por el kichnerismo, aunque algunos analistas del mercado aseguran que el Banco Central no hizo mucho por frenar una leve presión sobre el dólar. Las provincias productoras y las petroleras se enteraron casi por los medios, sin negociación mediante. Recién este miércoles las partes están citadas a la mesa para buscar consensos.

El cuadro de malas noticias se completó con la decisión del Gobierno nacional de eliminar el IVA a una serie de productos alimentarios básicos. En un intento por amortiguar el golpe inflacionario en bolsillos que ya no resisten más impactó de manera colateral en las Provincias, que sufrirán la baja en la recaudación y, consecuentemente, en la masa coparticipable. En Mendoza el Gobierno provincial se esperanza con que una baja de precios -si los empresarios no se “comen” el beneficio- mejorará las ventas y el efecto fiscal se amortiguará... por ahora: a esperar y ver.

Dentro de este cuadro de situación como mínimo preocupante, el turismo vuelve a enarbolar bandera como potencial salvador o, al menos, amortiguador del shock.

Como ha sucedido en cada devaluación marcada, la conveniencia en el cambio se ha convertido en un imán cada vez más atractivo para visitantes extranjeros, con efecto inmediato en Chile y Brasil y, a mediano plazo, el resto del mundo.

La llegada de visitantes a la provincia en la última década ha sido un verdadero impulso para la economía local, con la nieve, el vino y la gastronomía como principales atractivos. Hoy el turismo representa más del 15% del PBG de Mendoza y sigue su senda positiva.

Para ponerlo en un ejemplo concreto: este fin de semana, mientras Nicolás Dujovne presentaba su renuncia como ministro de Hacienda y en Buenos Aires preparaban la asunción de Hernán Lacunza, unas 45.000 personas visitaban Mendoza por el fin de semana largo del Día de San Martín, dejando en la provincia casi $100 millones, según estimaciones del Emetur.

Por ello, mientras se espera el impacto del tsunami inflacionario que desatará la nueva devaluación, El Plumerillo y Los Libertadores serán, tal vez, las únicas luces en un túnel que no ve aún su final más allá de octubre.