"Les diría que jueguen libres, uno de los dos tendría que estar bien y ganarme el partido. Y si los dos tienen fiebre, me tendrá que salvar el gordo Ronaldo", expresa Sergio Agüero, fantaseando con el armado de un once histórico y haciendo referencia a los dos compatriotas suyos que marcaron la historia del deporte.

El "Kun" aclaró que el apodo del brasileño es cariñoso y lo señaló como su ídolo. Después, puso en el arco a Oliver Kahn, "un histórico alemán" y alineó a tres defensores "con bastante huevo" en el fondo. En el mediocampo ubicó por izquierda a un lateral volante como Roberto Carlos, "para tirar centritos" y después, tres hombres para controlar la pelota: Iniesta, Redondo y Xavi. Eso sí, se preocupó pensando cuál de los tres retrocedería...