Receta clásica de pastel de piña Invertido: del Horno a la mesa en minutos

El pastel de piña invertido es un clásico irresistible que combina lo mejor de dos mundos: un pastel esponjoso y una cobertura dulce y caramelizada. Originario de Estados Unidos, este postre ha sido un favorito durante generaciones, gracias a su presentación llamativa y su sabor refrescante. La receta comienza con una capa de caramelo dorado, que se vierte en el molde y se deja enfriar antes de añadir las rodajas de piña y cerezas marrasquino. Esta base caramelizada no solo proporciona un contraste dulce, sino que también asegura que cada bocado esté impregnado con el rico sabor de la piña y el caramelo.

El pastel en sí se prepara con una mezcla suave y ligera que se vierte sobre la piña, creando una deliciosa combinación de texturas al hornearse. A medida que el pastel se cocina, el caramelo se convierte en una capa brillante y pegajosa que envuelve las frutas, creando un efecto visual atractivo al desmoldar el pastel. Ideal para ocasiones especiales o simplemente para disfrutar en una tarde, el pastel de piña invertido es una delicia que siempre deja una impresión duradera. Su sabor tropical y su presentación elegante lo convierten en el postre perfecto para cualquier celebración. ¡Vamos a la receta!

Ingredientes

Para el caramelo: 100 gramos de mantequilla sin sal (a temperatura ambiente), 200 gramos de azúcar moreno (puede ser azúcar moreno claro o oscuro, según prefieras), 1/2 taza de jarabe de maíz (opcional, para una textura más suave y brillante), 1/4 taza de agua.

Para la base de piña: 1 lata de piña en rodajas (aproximadamente 450 gramos, escurrida), 12 cerezas marrasquino (puedes usar cerezas frescas si prefieres).

Para el pastel: 2 tazas de harina para todo uso (más 2 cucharadas adicionales para enharinar el molde), 1 1/2 tazas de azúcar granulada, 1/2 taza de mantequilla sin sal (a temperatura ambiente), 1/2 taza de leche entera, 2 huevos grandes, 1 1/2 cucharaditas de polvo de hornear, 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio, 1/4 cucharadita de sal, 1 cucharadita de extracto de vainilla, 1/2 taza de jugo de piña (de la lata de piña).

Procedimiento

Prepara el caramelo

1. En una cacerola mediana, derrite la mantequilla a fuego medio.
2. Añade el azúcar moreno y el jarabe de maíz (si lo estás utilizando). Remueve continuamente para combinar bien los ingredientes y disolver el azúcar.
3. Cocina la mezcla durante unos 4-5 minutos hasta que se espese y adquiera un color dorado profundo. No dejes que se queme; debe tener un tono ámbar.
4. Vierte el caramelo caliente en el fondo de un molde para pastel de 23 cm de diámetro. Inclina el molde para que el caramelo cubra toda la base de manera uniforme. Deja que se enfríe mientras preparas el resto del pastel.

Prepara la base de piña

1. Coloca las rodajas de piña en el caramelo enfriado. Asegúrate de que queden distribuidas uniformemente.
2. Coloca una cereza en el centro de cada rodaja de piña. Si usas cerezas frescas, simplemente coloca una cereza en el centro de cada rodaja de piña.

Prepara la masa del pastel

1. Precalienta el horno a 175°C (350°F). Engrasa y enharina el molde donde pusiste el caramelo (si aún no lo has hecho).
2. En un bol grande, tamiza la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio y la sal. Reserva.
3. En otro bol, bate la mantequilla con el azúcar granulada hasta obtener una mezcla suave y cremosa.
4. Añade los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición. Incorpora el extracto de vainilla.
5. Agrega los ingredientes secos en tres partes, alternando con la leche y el jugo de piña, comenzando y terminando con los ingredientes secos. Mezcla hasta que esté bien combinado, pero sin batir en exceso.
6. Vierte la masa sobre la base de piña en el molde, extendiéndola uniformemente con una espátula.

Hornea y desmolda

1. Hornea en el horno precalentado durante 40-45 minutos, o hasta que un palillo insertado en el centro del pastel salga limpio.
2. Deja enfriar el pastel en el molde durante 10 minutos. Luego, pasa un cuchillo por los bordes del molde para despegar el pastel.
3. Coloca un plato grande sobre el molde y, con cuidado, voltea el pastel para que la base de piña quede en la parte superior. Deja enfriar completamente antes de servir.

¡Saborea tu pastel de piña invertido! Es perfecto para una merienda o como postre para una ocasión especial. ¡Y a disfrutar! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a [email protected] te contestaremos a la brevedad.