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Dulce y crujiente: disfruta de la sbrisolona en tu mesa

Aprende paso a paso y fácilmente a preparar una deliciosa sbrisolona con nuestra receta favorita e imbatible a cocinar!

Napsix sábado, 16 de marzo de 2024 · 23:04 hs
Dulce y crujiente: disfruta de la sbrisolona en tu mesa
Sbrisolona tradicional: receta auténtica para un postre inolvidable Foto: Shutterstock

La sbrisolona, un postre clásico italiano originario de la región de Lombardía, es un manjar que cautiva con su textura crujiente y su sabor almendrado. Este dulce, que se remonta a siglos atrás, se ha convertido en un símbolo de la rica tradición culinaria italiana y es apreciado por su simplicidad y su delicioso sabor. La sbrisolona es mucho más que un simple postre; representa el amor y la pasión por la cocina, transmitidos a lo largo de generaciones en las familias italianas.

La sbrisolona tiene sus raíces en la región de Lombardía, en el norte de Italia. Se cree que este postre tiene más de 500 años de antigüedad y ha sido disfrutado por generaciones como un dulce tradicional de la zona. Fuente: Shutterstock

El nombre "sbrisolona" proviene del término italiano "sbrisolare", que significa desmenuzar. Esto se debe a su característica textura desmenuzable, que se logra al trabajar la masa con mantequilla y azúcar hasta obtener migajas gruesas. La adición de almendras tostadas aporta un sabor y una textura únicos, mientras que la ralladura de limón añade un toque de frescura.

Te invitamos a descubrir el arte de hacer sbrisolona en casa y a deleitarte con este dulce italiano clásico. Desde la selección de los mejores ingredientes hasta los consejos para lograr la textura perfecta, te guiaremos paso a paso para que puedas disfrutar de esta delicia en tu propia cocina. ¡Prepárate para enamorarte de la sbrisolona y sorprender a tus seres queridos con su encanto único y su exquisito sabor! ¡Vamos a la receta!

El nombre "sbrisolona" proviene del dialecto lombardo y hace referencia a su textura desmenuzable. "sbrisolare" en italiano significa desmenuzar, lo que describe perfectamente la consistencia crujiente y migajosa de este postre. Fuente: Shutterstock

Ingredientes

250g de harina de almendra, 250g de harina para todo uso, 200g de azúcar granulada, 200g de mantequilla fría cortada en cubos, 100g de almendras enteras ligeramente tostadas, 2 huevos grandes, 1 cucharadita de ralladura de limón, una pizca de sal.

 

Procedimiento

  1. Precalienta tu horno a 180°C. Engrasa ligeramente un molde para tarta de aproximadamente 24 cm de diámetro y reserva.
  2. En un tazón grande, combina la harina de almendra, la harina para todo uso, el azúcar y la sal. Mezcla bien con una cuchara o batidor para asegurarte de que todos los ingredientes estén completamente integrados.
  3. Agrega los cubos de mantequilla fría a la mezcla de harina y usa tus dedos o un cortador de masa para trabajar la mantequilla en la harina hasta que la mezcla se parezca a migajas gruesas.
  4. Agrega los huevos y la ralladura de limón a la mezcla de harina y mantequilla. Mezcla con las manos hasta que se forme una masa suave y homogénea. La masa debe ser bastante grumosa y desmenuzable, no pegajosa.
  5. Agrega las almendras ligeramente tostadas a la masa y mezcla suavemente para distribuirlas uniformemente.
  6. Vierte la masa en el molde preparado y usa tus manos para presionarla suavemente hacia abajo y distribuirla de manera uniforme por el fondo del molde. No presiones demasiado, ya que queremos mantener la textura desmenuzable de la sbrisolona.
  7. Coloca el molde en el horno precalentado y hornea la sbrisolona durante aproximadamente 35-40 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente en los bordes.
Aunque la receta tradicional de sbrisolona incluye almendras, azúcar, harina y mantequilla, se pueden agregar ingredientes adicionales para variar su sabor. Algunas versiones pueden incluir chocolate rallado, frutas secas o incluso licor para darle un toque único. Fuente: Shutterstock

Una vez horneada, retira la sbrisolona del horno y deja que se enfríe completamente en el molde sobre una rejilla. Una vez fría, corta la sbrisolona en porciones individuales y sírvela tal cual o acompañada de una bola de helado de vainilla o un poco de crema batida (nata).

La sbrisolona se mantendrá fresca en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante varios días. Puedes guardar las sobras para disfrutarlas más tarde.

¡Saborea esta sbrisolona casera con su textura crujiente y su sabor a almendra que se deshace en la boca! Es el acompañamiento perfecto para tu café de la mañana o para compartir en una reunión con amigos y familiares.¡Y a disfrutar! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.

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