Struffoli: el delicioso tesoro de la repostería italiana

Struffoli, un encantador y tradicional postre italiano, ha deleitado los paladares durante siglos con su deliciosa combinación de dulzura y textura crujiente. Originario de Nápoles, este exquisito manjar se ha convertido en un elemento imprescindible en las celebraciones festivas y en la mesa de postres de todo el país durante las temporadas navideñas y de fiestas.

Los struffoli son pequeñas bolitas de masa fritas hasta obtener un dorado perfecto, que luego se bañan en miel caliente y se decoran con frutas confitadas, almendras y, a veces, incluso sprinkles de colores. La presentación en forma de montículo hace que los struffoli sean un espectáculo visualmente impresionante, lo que los convierte en el centro de atención en cualquier ocasión festiva.

Este postre no solo deleita el paladar, sino que también está impregnado de tradición y cultura italiana. Cada familia puede tener su propia manera de elaborarlos, transmitida de generación en generación, lo que le agrega un toque de nostalgia y calidez a cada bocado. Te guiaremos en un viaje culinario para descubrir cómo hacer struffoli en casa y revivir la auténtica tradición italiana en tu propia cocina. ¡Prepárate para sorprender a tus seres queridos con este delicioso postre lleno de historia y sabor! ¡Vamos a la receta!

Ingredientes

Para la masa: 3 tazas de harina de trigo, 4 huevos, 1/4 taza de azúcar, 2 cucharadas de mantequilla derretida, una pizca de sal, aceite vegetal para freír.

Para el baño de miel: 1 taza de miel, 1/2 taza de azúcar, 1/4 taza de agua, 1 cucharadita de ralladura de limón.

Frutas confitadas para decorar, amendras picadas para decorar (opcional).

Procedimiento

Prepara la masa:

1. En un tazón grande, mezcla la harina y el azúcar. Haz un hueco en el centro y agrega los huevos, la mantequilla derretida y la pizca de sal.
2. Con un tenedor o con las manos, comienza a mezclar los ingredientes hasta formar una masa homogénea.
3. Transfiere la masa a una superficie enharinada y amasa durante unos 5-7 minutos, o hasta que esté suave y elástica.
4. Forma la masa en una bola, cúbrela con film transparente y déjala reposar durante al menos 30 minutos.:
5. Divide la masa en porciones más pequeñas y forma rollos delgados del grosor de un dedo.
6. Corta los rollos en trozos pequeños, aproximadamente del tamaño de un guisante.
7. En una bandeja enharinada, coloca los trozos de masa cortados y déjalos secar durante unos 15-20 minutos.
8. Calienta abundante aceite vegetal en una sartén profunda a fuego medio-alto y cuando el aceite esté caliente, agrega los trozos de masa en lotes pequeños para evitar que se peguen.
9. Fríe los struffoli hasta que estén dorados y crujientes, aproximadamente de 2 a 3 minutos. Asegúrate de voltearlos ocasionalmente para que se doren de manera uniforme. Retira los struffoli con una espumadera y escúrrelos sobre papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.

Prepara el baño de miel:

1. En una cacerola pequeña, calienta la miel, el azúcar, el agua y la ralladura de limón a fuego medio-alto.
2. Lleva la mezcla a ebullición y cocina durante unos 5 minutos, revolviendo constantemente, hasta que se forme un almíbar espeso.
3. Transfiere los struffoli fritos a un plato grande y vierte el almíbar de miel caliente sobre ellos, cubriéndolos completamente.
4. Usando dos tenedores o una espátula, mezcla suavemente los struffoli para asegurarte de que estén completamente cubiertos de miel.
5. Decora la parte superior con frutas confitadas y almendras picadas, si lo deseas.

Deja que los struffoli se enfríen y se asienten durante al menos una hora antes de servir. Sirve los struffoli en una fuente grande o en porciones individuales, y saborea este delicioso postre italiano junto con tus seres queridos. ¡Y a disfrutar! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.