Receta de cocadas de coco: sabor y tradición en cada bocado
Aprende paso a paso y fácilmente a preparar unas deliciosas cocadas con nuestra receta favorita e imbatible ¡a cocinar!
Las cocadas son un dulce tradicional y delicioso que ha trascendido fronteras, siendo una joya de la repostería latinoamericana. Con su base de coco rallado, azúcar y leche condensada, este postre se caracteriza por su sabor único y su textura firme por fuera pero suave y húmeda por dentro. Aunque su origen es incierto, se encuentran versiones de cocadas en casi todos los países de América Latina, cada una con su toque particular. En algunos lugares se elaboran al horno, mientras que en otros se cocinan a fuego lento en una sartén.
La sencillez de los ingredientes y su preparación rápida las convierte en una opción ideal para disfrutar en cualquier momento, ya sea como postre, snack o incluso como obsequio en celebraciones. Las cocadas se pueden encontrar en diversas presentaciones: en forma de pequeños montoncitos, en barras, o incluso acompañadas de otros ingredientes como nueces, almendras o frutas.
Este dulce, con su sabor tropical y su irresistible aroma a coco, no solo es un placer para el paladar, sino que también evoca recuerdos de la infancia y de momentos compartidos en familia. Prepararlas en casa es una excelente manera de experimentar con la cocina tradicional y sorprender a los demás con un bocado de sabor auténtico. ¡Vamos a la receta!
Ingredientes
500 gramos de coco rallado (preferentemente fresco, si no, se puede usar deshidratado o en polvo, pero el fresco dará un mejor sabor), 400 gramos de leche condensada (una lata de leche condensada, que será la base del dulzor y cremosidad), 100 gramos de azúcar blanca (puedes ajustar al gusto si prefieres que las cocadas sean más o menos dulces), 1 cucharadita de extracto de vainilla (opcional, pero le da un toque aromático y redondea el sabor), 2 cucharadas de mantequilla (preferentemente sin sal, para darle suavidad a la mezcla), 1 pizca de sal (para equilibrar el sabor dulce), hojas de plátano o papel encerado (para colocar las cocadas y evitar que se peguen).
Procedimiento
- Si usas coco fresco, empieza por pelar y rallar el coco. Para esto, puedes hacerlo a mano o usar un rallador eléctrico, si tienes. Si optas por coco deshidratado, asegúrate de hidratarlo con un poco de agua (unos 50 ml) para que se rehidrate y obtenga la textura adecuada.
- En una sartén grande o en una cazuela, derrite la mantequilla a fuego medio. Una vez derretida, agrega el coco rallado junto con la leche condensada. Mezcla bien con una espátula de madera o una cuchara de silicona. La leche condensada aportará el toque dulce y cremoso a la cocada.
- Incorpora el azúcar blanca y la pizca de sal. Revuelve bien para que el azúcar se disuelva completamente en la mezcla. En este punto, si decides usar la vainilla, añádela para darle ese toque aromático.
- Cocina la mezcla a fuego medio-bajo, revolviendo constantemente para evitar que se pegue o se queme. La mezcla comenzará a espesar después de unos 10-15 minutos. Continúa removiendo hasta que la cocada tenga una consistencia más espesa, similar a una masa húmeda. Este proceso puede tardar entre 20 a 30 minutos, dependiendo de la cantidad de líquido en el coco y la intensidad del fuego.
- Cuando la mezcla esté lista, retírala del fuego. En una bandeja, coloca hojas de plátano (si las tienes disponibles) o papel encerado para que las cocadas no se peguen. Usando dos cucharas o tus manos (si las dejas enfriar un poco), toma pequeñas porciones de la mezcla y forma montoncitos de tamaño similar a una nuez o un pequeño puño.
- Coloca las cocadas sobre el papel encerado o las hojas de plátano. Deja que se enfríen completamente a temperatura ambiente. Al enfriarse, las cocadas tomarán una textura firme y ligeramente pegajosa por fuera, pero suaves por dentro.
Una vez frías, puedes almacenar las cocadas en un recipiente hermético. Si las dejas en un lugar fresco y seco, se mantendrán bien durante varios días. También puedes refrigerarlas si prefieres que duren más tiempo, pero asegúrate de que estén bien envueltas o en un recipiente cerrado para evitar que se resequen.
Las cocadas son perfectas para saborear con una taza de café o como un regalo casero para compartir con amigos y familiares. ¡Y a disfrutar! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.