Nunca más vas a posponer la alarma después de enterarte esto
Te contamos por qué no es aconsejable posponer el despertador.
Hay personas que se pueden despertar fácilmente una vez que suena la alarma. Estos individuos, al escuchar el despertador, responden de inmediato, saltando de la cama con energía y listos para enfrentar el día. Este grupo de personas parece tener una habilidad innata para ajustar su ritmo, despertándose con relativa facilidad y mostrando una mayor disposición para iniciar la jornada.
Por otro lado, existe otro grupo de individuos que experimentan dificultades al despertar. La tendencia a posponer repetidamente la alarma puede deberse a factores como la falta de sueño adecuado o simplemente una preferencia personal por disfrutar de unos minutos adicionales de descanso. Para estas personas, el acto de posponer la alarma puede convertirse en una rutina arraigada, a veces, incluso en una batalla diaria entre la necesidad de levantarse y el deseo de permanecer un poco más en la cama.
Lo que no sabe este último grupo de personas es que quedarse en la cama cinco minutos más puede ser perjudicial para nosotros. En el artículo de hoy te contamos por qué no se aconseja poner varias alarmas y posponerlas, para dormir unos minutos más y levantarse luego de varios intentos. Muchas veces pensamos que es lo ideal para descansar un poco más, pero la realidad es diferente.
Según un artículo de la BBC, donde hablaron expertos en medicina del sueño, cuándo programas varias alarmas y las apagas para levantarte en unos minutos, tu cerebro comienza de nuevo su ciclo de sueño. Una vez que despiertas, te levantas más cansado que la primera vez.
De acuerdo a las declaraciones del Doctor Terán, no hay “una respuesta científica” sólida sobre el abanico de posibilidades que trae posponer la alarma para despertar. Pese a esto, reveló: “Sin embargo, hay un cierto nivel de conocimiento en base a las observaciones que se han hecho sobre los ritmos biológicos del sueño”.
Como dijimos anteriormente, al momento que apagamos la alarma y seguimos durmiendo, nuestro cerebro comienza el ciclo de sueño nuevamente. Si apagamos el despertador una vez más, puede ser que nos encontremos en una etapa de sueño más profunda, entonces no se activan los mecanismos de vigilia y nos sentimos aturdidos o somnolientos. Según el experto Francisco Segarra, retrasar el despertador no provoca problemas de salud, pero tampoco es beneficioso. La realidad es que no es la forma ideal de comenzar el día. Mientras más rompemos el sueño, peor es la calidad de nuestro descanso. Lo ideal es dormir 8 horas cada día de la semana. Así, nos sentiremos descansados y activos.