Compraron la casa de Harry Potter y ahora viven un calvario
Se trata de la propiedad donde vivía el hechicero junto con sus tíos.
La saga de Harry Potter, creada por la escritora británica J.K. Rowling, se ha convertido en una de las franquicias literarias y cinematográficas más queridas y exitosas en todo el mundo. La historia del joven hechicero, desde su descubrimiento en el mundo mágico hasta su épica lucha contra las fuerzas oscuras, ha cautivado a personas de todas las edades y ha dejado una marca indeleble en la cultura popular.
La locura por Harry Potter puede llevar a los fanáticos a hacer cosas alocadas e incluso salirse de control. Un caso particular tiene que ver con los propietarios de una casa ubicada en la localidad de Bracknell, Berkshire en Reino Unido. Al parecer los dueños del hogar viven todos los días un infierno por culpa de los fans de la película.
Se trata de la propiedad donde vivió Harry Potter a lo largo de la saga, una casa ubicada en el número 4 de Privet Drive, en Little Whinging, una localidad ficticia que aparece en los libros. De acuerdo a la ficción, el mago vivía en la vivienda junto con Los Dursley, sus desalmados tíos. El hechicero pasó toda su vida en esa casa y una vez que ingresó en Howarts, solo la visitó durante la temporada de vacaciones.
Al día de hoy, quienes compraron la casa afirman que viven una pesadilla. Al parecer los fanáticos de la saga no dejan de aparecer en la zona. Recientemente, la propietaria, una mujer que prefiere mantenerse en anonimato, habló con el periódico inglés 'The Sun' y reveló: "Hemos tenido personas bañadas en lágrimas. Es extraño. Si son niños, lo entiendes. Pero los adultos... A veces se visten con la ropa completa de la película y recrean escenas".
La mujer confirmó que en una ocasión intentaron trepar la valla para ingresar a la casa, entre otras cuestiones. Sin embargo, la familia intenta tener una buena actitud con los fanáticos, e incluso mueve los coches para que puedan tomar buenas fotos. "Harry Potter es increíble. Lo entiendo. Pero llegas a casa del trabajo y todos están en tu calle. Es bastante loco", recalcó con un dejo de resignación.
De acuerdo a las declaraciones, llegan docenas de personas durante todo el día, no importa si es de noche y a veces llegan en grupos. El vecino Asad Shahid, quien también sufre por la horda de fanáticos, reveló: "A veces aparecen camionetas y minibuses que se detienen aquí. Muchos turistas de todo el mundo. He conocido a personas que han venido de Estados Unidos, Japón o Alemania". Al parecer, la locura por Harry Potter puede llevar a los fanáticos a hacer cosas impensadas y esto afecta a quienes viven en la zona donde se encuentra esta famosa propiedad.