Cómo hacer una limpieza profunda de armario para tener la ropa perfecta
A veces debemos dedicarle tiempo a nuestro armario.
El armario suele pasar desapercibido en las rutinas de limpieza, sin embargo es un espacio crucial para el cuidado de nuestras prendas. La acumulación de polvo y suciedad no solo puede afectar la presentación de la ropa, sino que también puede contribuir a la formación de malos olores y la proliferación de ácaros o polillas.
Sabemos que a muchas personas les da flojera hacer esta tarea, por eso hoy vamos a profundizar en las cuestiones esenciales que deberías incluir en tu rutina de limpieza. A continuación, te dejamos algunos consejos para limpiar el closet de manera fácil y rápida, teniendo en cuenta que es un punto importante para conservar la ropa de la mejor manera.
Aprovecha los cambios de estación para cambiar las prendas de lugar y además para hacer una limpieza profunda del armario. Puedes seleccionar la ropa que vas a guardar para la próxima temporada y la que vas a donar o vender. Lo ideal para mantener las prendas en buen estado es guardarlas en contenedores de plástico o cajas. De esta manera, se mantienen limpias y sin polvo.
Deja abierto el closet aunque sea 15 minutos para que se ventile correctamente. Es recomendable hacerlo de forma habitual, aunque las prendas se encuentren dentro. En el caso de que decidas limpiarlo en profundidad, retira todas las cosas del interior y quita el polvo con ayuda de un paño húmedo o una aspiradora.
Si el armario es de madera, consigue un producto de limpieza específico para este material o puedes utilizar una preparación de agua y jabón. Pon atención a cada rincón, los cajones, puertas, maleteros, separaciones y demás. En el caso de que la puerta del placard tenga espejo, no olvides limpiarlo.
Cuando el closet esté sumamente limpio, aprovecha para guardar cada cosa en su lugar. La clave es guardar las prendas y organizarlas teniendo en cuenta el uso que le damos a cada una. Si acabas de lavar la ropa, asegúrate de que se encuentre seca, pues así evitamos que se genere humedad y malos olores. Una buena forma de organizar el armario es colocar las prendas en secciones diferentes, pantalones por un lado, remeras por otro, y así. Finalmente, si guardas los zapatos en cajas, evitarás que se llenen de polvo y se mantengan mejor.