Pestiños auténticos en 8 pasos: no esperes a la próxima Semana Santa
Aprende paso a paso a preparar unos exquisitos pestiños españoles con nuestra receta favorita e imbatible ¡manos a la obra!
Los pestiños son un dulce tradicional y delicioso que forma parte de la rica gastronomía de España, especialmente durante la temporada de Semana Santa y otras festividades religiosas. Estos bocados fritos, bañados en miel y espolvoreados con azúcar y canela, son una auténtica tentación para el paladar y una muestra de la exquisita repostería española.
Con una historia que se remonta a siglos atrás, los pestiños han perdurado como un auténtico icono de la tradición culinaria española. La receta varía ligeramente según la región, pero en esencia, siempre se trata de una masa frita que se endulza con miel aromatizada.
Los pestiños no solo son un manjar dulce, sino que también evocan un sentimiento de nostalgia y celebración. Cada bocado de estos deliciosos dulces nos transporta a un viaje a través del tiempo y las costumbres, invitándonos a compartir momentos especiales con nuestros seres queridos mientras saboreamos el encanto de la tradición. ¡A cocinar!
Ingredientes
Para la masa: 500 g de harina de trigo, 50 ml de aceite de oliva suave, 50 ml de vino blanco dulce (como moscatel o vino de Málaga), 50 ml de anís dulce, 50 ml de agua, 1 cucharadita de ajonjolí (sésamo), 1 cucharadita de semillas de anís,1 cucharadita de canela molida, 1/2 cucharadita de sal.
Para la miel: 250 g de miel, 100 ml de agua, la cáscara de medio limón, 1 rama de canela.
Para freír: aceite de girasol o aceite de oliva suave cantidad necesaria.
Para espolvorear: azúcar blanca o glass, canela en polvo.
Procedimiento
- En un tazón grande, mezcla la harina, el aceite de oliva, el vino blanco, el anís dulce, el agua, el ajonjolí, las semillas de anís, la canela molida y la sal. Amasa todos los ingredientes hasta obtener una masa suave y homogénea. Cubre la masa con un paño limpio y déjala reposar durante al menos 30 minutos.
- Mientras la masa reposa, prepara la miel. En una cacerola, calienta la miel, el agua, la cáscara de medio limón y la rama de canela a fuego medio. Lleva la mezcla a ebullición y luego reduce el fuego para que la miel hierva suavemente durante unos 5 minutos. Retira la cacerola del fuego y reserva la miel.
- Divide la masa en pequeñas porciones y forma bolas del tamaño de una nuez. Extiende cada bola de masa con un rodillo hasta que tenga aproximadamente 2-3 mm de grosor.
- En una superficie limpia, corta la masa estirada en rectángulos de unos 5 cm de largo por 3 cm de ancho.
- Haz un pequeño corte en el centro de cada rectángulo y pasa uno de los extremos por el agujero para formar una especie de lazo o nudo.
- Calienta abundante aceite en una sartén a fuego medio-alto. Fríe los pestiños en lotes hasta que estén dorados y crujientes por ambos lados. Asegúrate de que el aceite esté a la temperatura adecuada para que los pestiños se cocinen de manera uniforme.
- Una vez fritos, retira los pestiños de la sartén y escúrrelos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
- Baña los pestiños en la miel caliente, sumergiéndolos completamente para que se impregnen bien. Luego, coloca los pestiños bañados en miel sobre una rejilla para que escurran el exceso de líquido.
Espolvorea los pestiños con azúcar y canela en polvo mientras aún están calientes, para que se adhiera a la miel y le dé un toque extra de dulzura y aroma. Deja que se enfríen completamente antes de servirlos. Sin dudas son un manjar tradicional que se disfruta especialmente durante las fiestas de Semana Santa.
Estos dulces fritos, bañados en miel y espolvoreados con azúcar y canela, son una auténtica delicia para compartir en familia o con amigos. Permiten disfrutar de una experiencia que nos transporta a la tradición y el encanto de las celebraciones españolas. Así que, ¡manos a la masa y a disfrutar de estos deliciosos pestiños! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.