Sencilla y deliciosa: la receta definitiva de exquisita pizza casera

La pizza casera es más que una receta; es un viaje sensorial que comienza con la mezcla de harina y levadura, se eleva con el aroma embriagador de la salsa de tomate y culmina en una obra maestra de queso fundido y sabores irresistibles. Este plato, originario de las calles adoquinadas de Nápoles, se ha convertido en un lienzo culinario donde la creatividad y la tradición se encuentran. Desde la primera mezcla de la masa hasta el aroma tentador que llena la cocina durante la cocción, la pizza casera es un ritual que trae consigo el sabor auténtico y el amor compartido alrededor de la mesa.

 

Cada hogar tiene su versión única, ya sea una margherita clásica con tomate, mozzarella y albahaca, o una combinación extravagante de ingredientes que refleje los gustos personales. Exploraremos la esencia de la pizza casera, guiándote a través de cada paso para que puedas crear tu propia obra maestra gastronómica. Descubre la alegría de amasar la masa, la emoción de verla elevarse, y la satisfacción de degustar una pizza recién salida del horno, hecha con amor y atención al detalle. ¡Prepárate para embarcarte en un viaje culinario que te lleva directo a la autenticidad y el deleite de la pizza casera!¡Vamos a la receta!

Ingredientes

Para la masa: 2 1/4 cucharaditas de levadura seca activa, 1 taza de agua tibia, 3 tazas de harina de trigo, 1 cucharadita de azúcar, 1 cucharadita de sal, 2 cucharadas de aceite de oliva.

Para la salsa de tomate: 1 lata de tomates triturados (400 g), 2 dientes de ajo picados, 1 cucharadita de orégano seco, 1 cucharadita de albahaca seca, sal y pimienta al gusto.

Para los ingredientes (opciones a elección): queso mozzarella rallado, queso parmesano rallado, champiñones rebanados, jamón, pepperoni, aceitunas negras rebanadas, pimientos rojos cortados en tiras, albahaca fresca para decorar.

 

Procedimiento

1. En un tazón pequeño, mezcla la levadura con el agua tibia y el azúcar. Deja reposar durante 5 minutos o hasta que la mezcla esté espumosa.
2. En un tazón grande, mezcla la harina y la sal. Haz un hueco en el centro y vierte la levadura activada y el aceite de oliva.
3. Amasa la mezcla hasta que obtengas una masa suave y elástica. Cubre el tazón con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
4. En una sartén, calienta un poco de aceite de oliva y saltea el ajo hasta que esté fragante.
5. Agrega los tomates triturados, el orégano, la albahaca, la sal y la pimienta. Cocina a fuego lento durante 15-20 minutos o hasta que la salsa espese.
6. Precalienta el horno a 220°C.
7. Estira la masa sobre una superficie enharinada hasta obtener el tamaño deseado.
8. Transfiere la masa a una bandeja para pizza o piedra para pizza.
9. Extiende una generosa capa de salsa de tomate sobre la masa y agrega el queso mozzarella rallado y cualquier otro ingrediente que desees.
10. Hornea la pizza en el horno precalentado durante 15-20 minutos o hasta que la masa esté dorada y el queso burbujeante.

Retira la pizza del horno y decora con albahaca fresca. Esta pizza casera te transportará a la autenticidad y el sabor de la verdadera pizza italiana. Ya sea que te decantes por una clásica margherita o una cargada de ingredientes, cada bocado es una celebración de la cocina casera y la pasión por la buena comida. Personaliza tu pizza con tus ingredientes favoritos y comparte esta deliciosa creación con aquellos a quienes más quieres. ¡Y a disfrutar! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.