Una receta muy crujiente, pollo frito al ajillo

Preparar pollo frito es un proceso muy fácil y delicioso. Es un platillo perfecto para snackear los fines de semana, solos o acompañado por deliciosas guarniciones cómo arroz o ensaladas. Existen diversas maneras de preparar pollo frito incluyendo en su preparación semillas, salsas y condimentos. También pueden prepararse al horno o fritas y variar el elemento de rebozado.

Para la receta de hoy prepararemos unas deliciosas alitas al ajillo. El hecho de que sean al ajillo quiere decir que se incluyen los sabores del ajo y perejil. Puedes incluir este sabor al momento de tratar con el pollo o si no mezclarlo con el agente rebozador. Pon manos a la obra y descubre cómo preparar una increíble receta para tu fin de semana.

Ingredientes:

• 1 kilogramo de Piezas de pollo
•  6 dientes de Ajo
•  2 piezas de Chile (opcional)
•  1½ tazas de Harina de trigo (210 gramos)
•  1½ tazas de Pan molido
•  1 taza de Leche entera
•  2 piezas de Huevo
•  1 pieza de Limón
•  1 pizca de Sal
•  1 pizca de Pimienta
•  1 taza de Aceite para freír

Procedimiento:

Tomamos el huevo y la leche, colocamos estos ingredientes en un tazón y los mezclamos perfectamente. 

Por otro lado, en un plato colocamos la harina de trigo, el pan molido y una pizca de sal y pimienta y, del mismo modo, los mezclamos perfectamente.

Ahora, tomamos las piezas de pollo y las sumergimos en la mezcla de huevo con leche, procurando que queden completamente impregnadas con esta mezcla.

Acto seguido, pasamos el pollo por la mezcla de harina y pan molido, lo cubrimos completamente con esta mezcla. Repetimos estos pasos con todas las piezas de carne y las reservamos un momento.

Luego, para hacer la salsa de ajo, tomamos los dientes de ajo y los partimos por la mitad. Aparte, limpiamos perfectamente el chile quitándole venas y semillas, y lo rebanamos en finas tiras.

Ahora, ponemos a freír el ajo en una sartén con suficiente aceite muy caliente durante unos segundos, seguido añadimos las tiras de chile, agregamos también una pizca de sal y pimienta, y el jugo de limón.

Añadimos al aceite caliente el pollo rebozado y dejamos que se cueza completamente. Es importante que la parte exterior de la carne quede bien dorada para obtener el pollo frito al ajillo crujiente.

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