Un postre único, sencillo y delicioso para preparar con esta simple receta
Aprende a preparar un dulce típico de la cocina andaluza en pocos pasos y sin mayores complicaciones. Su sabor te cautivará. Sigue esta receta y agasaja a tus seres queridos.
La poleá es una receta típica de la cocina andaluza, especialmente de Sevilla, Huelva y Cádiz. Surge de una variante dulce de las gachas, que se consumía especialmente en otoño e invierno durante los años difíciles y los momentos de escasez. Hoy, desde MDZ, te compartiremos un paso a paso sencillo para que prepares este postre sabrosísimo fácilmente. ¡Manos a la obra!
Ingredientes
5 cucharadas de aceite de oliva virgen
Un litro y medio de leche entera
6 a 8 cucharadas soperas colmadas de harina de repostería
8 cucharadas soperas de azúcar
Una cucharadita de anís en grano
Una rama de canela grande
Corteza de naranja y de limón
Pan del día anterior
Una pizca de sal
Procedimiento
El primer paso para preparar deliciosas poleás al estilo andaluz es comenzar a freír en una cacerola grande los curruscos de pan en el aceite. Una vez que estén tostados, sácalos del fuego y reserva.
Lo que harás ahora es agregar una cucharada de anís en grano en el aceite sobrante. También añade las cáscaras de limón y naranja y deja sofreír muy ligeramente. Ahora, saca las cáscaras y tuesta las ocho cucharadas de harina. Esto servirá para que le quites el sabor crudo. Llévala al fuego por aproximadamente dos a tres minutos, a fuego medio bajo, ya que tampoco buscas tostarla ¡ni mucho menos quemarla!
El siguiente paso es ir añadiendo en este momento la leche poco a poco sin dejar de remover. Ayúdate con un batidor de mano o con varillas para que no salgan grumos. Muchas veces los grumos no se pueden evitar, ya que esta crema no lleva demasiado tenor graso (aceite). Pero lo que puedes hacer es, cuando comience a espesar, pásala por la batidora eléctrica y obtendrás una crema suave y fina.
Ahora debes añadir el palo de canela entero y las cáscaras que habías reservado en un comienzo mientras continúas removiendo bien. Con el fuego aún bajo revuelve hasta que notes bien cocida la crema y se espese a tu gusto. Cuando logres el punto de espesor en la crema, apártala del fuego y sírvela en una fuente. Junto con esta, corona el platillo con los curruscos de pan que ya habías freído y, opcionalmente, decora también con un toque de canela molida. Deja enfriar a temperatura ambiente o en el refri. ¡Y estarán listas estas sabrosas poleás!
Como verás, es una receta muy sencilla y más que deliciosa para compartir con seres queridos. ¡Queremos saber cómo te salieron! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.