Aprende a preparar un delicioso pan dulce ¡Con remolacha!

La remolacha es un vegetal muy beneficioso para nuestra salud. Su color característico indica una gran presencia de agentes antioxidantes que ayudan a mantener nuestra salud en su mejor estado. Su sabor tiene tintes dulces, lo cual la hace perfecta para protagonizar un amplio espectro de recetas, como el budín que te enseñaremos a preparar hoy.

Para disfrutar de este delicioso pan de remolacha utilizaremos cacao y endulzante que combinarán y acompañarán perfecto al dulzor natural de este vegetal, sin la necesidad de añadir grandes cantidades de azúcar. También puedes añadir a esta receta tus especias favoritas como canela o nuez moscada.

Ingredientes:

• 130 gramos de puré de remolacha
•  1 cucharada sopera de edulcorante apto cocción
•  ? taza de aceite
•  2 huevos
•  1 taza de harina 0000
•  ½ naranja (jugo y ralladura)
•  1 cucharada sopera de cacao amargo
•  1 cucharada postre de polvo de hornear
•  ½ cucharadita de bicarbonato de sodio

Procedimiento:

Para empezar con la receta del budín de remolacha o bizcocho de remolacha esponjoso, primero cocina el vegetal con una parte del cabo en abundante agua hirviendo, debes cocinar hasta que esté bien blanda al pincharla.

Cuando estén cocidas las remolachas, pélalas y retira los tallos para procesar con el jugo de naranja hasta obtener un puré liso y sin grumos. Resérvalo para que se entibie mientras continúas con el resto de la preparación.

Bate los huevos a temperatura ambiente hasta obtener una consistencia aireada. En este punto, agrega el edulcorante, el aceite en forma de hilo mientras continúas batiendo, añade también la ralladura de naranja.

Agrega al batido la mitad del puré de remolacha, la mitad de la harina, el polvo de hornear y el cacao.

Agrega la mitad restante del puré de remolacha y de la harina.

Vuelca la preparación de la torta de remolacha en el molde donde desees cocinar tu budín. En este caso, es un molde de 24 x 9 x 6 cm. Cocina el postre de remolacha en el horno precalentado a 180 ºC durante unos 25 minutos hasta que esté quebrado encima y, al pincharlo, no salgan restos de la preparación.