Planta del incienso: ornamental, aromática y repelente de mosquitos

Planta del incienso, Falso incienso y Plectranto son algunos de los nombres con los que se conoce a Plectranthus coleoides. Dentro de esta familia existen más de 1.000 especies descriptas. Son generalmente plantas ornamentales muy populares, sobre todo para jardines colgantes. 

La planta del incienso es una especie herbácea perenne que se caracteriza por tener hojas acorazonadas de un intenso color verde claro. Sus bordes son ondulados y de un color más claro. Esto hace que sea muy llamativa.

Su tamaño no es excesivo, pero tiene un follaje denso y los tallos pueden crecer como colgantes o esparcirse como una mata. Es por esto que resulta muy elegida para jardines colgantes o balcones.

Pero estos no son los únicos beneficios de la Plectranto. Es que sus hojas tienen un fuerte olor similar al incienso. Este aroma las convierte en grandes aliadas a la hora de combatir mosquitos y otros insectos.

Cuidados de la planta del incienso

Esta especie puede ser cultivada en interiores ya que no soporta los rayos del sol directo ni el frío. Sin embargo, tiene altos requerimientos de luminosidad. Por ello, es importante colocarla cerca de las ventanas para que crezca saludable. En el exterior, lo ideal es ubicarla en semisombra, pero protegerla durante el invierno.

La floración es en forma de espiga de colores lavanda o blanco y no tiene un gran poder ornamental, por eso se las suele quitar para impedir que la plante gaste energía.

El riego es un factor muy importante en el cuidado de esta planta debido a que sus raíces pueden ser muy sensibles a los excesos. En verano debe ser frecuente, sin provocar encharcamientos.