Qué es el peeling ultrasónico y qué cuidados debés tener

Someterse a un tratamiento de belleza en el rostro implica conocer muy bien la técnica que se usará y sus consecuencias debido a que, a pesar de ser métodos no invasivos, un inexperto puede dejar manchas o heridas en nuestro cutis que pueden quedar de por vida.

Antes de elegir cualquier tipo de práctica, lo más importante es asesorarte con un dermatólogo ya que tendrás el consejo de un especialista que te guiará y dará detalles sobre tu tipo de piel, el problema que padeces y el tratamiento más adecuado.

El peeling ultrasónico es una técnica que ha ganado muchos adeptos en los últimos años, incluso, ya existen aparatos para poder hacerlo en casa. Su finalidad en la eliminación de residuos y células muertas que tenemos en nuestro rostro y no podemos quitar con mascarillas.

Esto se logra gracias a las vibraciones que son emitidas por el cabezal del aparato, el cual tiene forma de espátula y sirve para ir removiendo las impurezas.

Además, las ondas de alta frecuencia también penetran la dermis y le otorgan calor lo que mejora la circulación sanguínea y abre los poros para una mejor limpieza.

Los beneficios de esta práctica son múltiples ya que, al tratarse de una limpieza profunda, elimina los puntos negros y una gran cantidad de manchas emparejando el tono del cutis. Puede mejorar el aspecto de arrugas y cicatrices y promover la producción de colágeno.

Pero también se debe tener en cuenta que no es aconsejable para todas las personas ni tipo de piles. Por ejemplo, se aconseja que las mujeres embarazadas no se sometan a esta práctica.

Tampoco es una buena idea para casos de enfermedades como la dermatitis y cuadros graves de acné.

Si lo que se busca es tener una piel radiante con solo una sesión de peeling ultrasónico no bastará y se requerirá mantener nuestra piel hidratada y saludable con una buena alimentación, protector solar y cremas