Muy casero: prepara unos deliciosos fettucinis de espinaca ¡con 3 ingredientes!

Una de las tradiciones que nos heredaron nuestras abuelas fue realizar pastas caseras para compartir en familia. Ya sean los gnocchis del 29, las pastas rellenas o bien fideos en sus distintas variedades. Son recetas muy sencillas y que se pueden adaptar a cualquier evento.

En este caso, traemos la receta de los fettuccine de espinaca, un clásico de la comida italiana que cada vez es más elegido en otras partes del mundo.  Una receta para acompañarlos con salsa blanca, filetto, mixta o bolognesa, los fettuccini son exquisitos en cualquiera de sus formas.

Ingredientes:

• 1 huevo fresco
• 300gr de harina común todo uso 0000
• 120gr de espinaca cruda

Preparación:

Comenzamos cocinando la espinaca. Cortamos el tallo y lavamos bien las hojas sin escurrirlas, ya que esa misma agua ayudará a cocinarlas. Cocinaremos en dos o tres tandas.

En un sartén o wok, colocamos un poco de aceite y agregamos las hojas de espinaca con ese resto de agua. Tapamos durante dos minutos, luego revolvemos para que se cocinen de manera pareja y volvemos a tapar el wok por 3 minutos más. Veremos que las hojas reducen su tamaño y adquieren un verde más oscuro.

Las retiramos del fuego y las dejamos escurrir en un colador mientras cocinamos el resto. Una vez frías, las apretamos para terminar de sacar bien el agua que almacenan y las colocamos en un vaso de minipimer o licuadora. A las espinacas cocidas le agregamos el huevo y licuamos hasta conseguir un líquido homogéneo. 

En un bowls, colocamos la harina con una cucharadita de sal, removemos y hacemos un hueco en el medio en donde colocaremos la mezcla de huevo y espinaca. Comenzamos a integrar y una vez formada la masa, pasamos a la mesada para poder amasar durante unos 10 minutos, hasta conseguir una masa lisa.

Dejamos reposar 20 minutos envuelta en film o dentro de una bolsa, procurando que esté en contacto para evitar que la masa se seque. Una vez pasado este tiempo, estiramos a 1-3 milímetros de grosor, espolvoreando harina cuando sea necesario para que la masa no se pegue o rompa.

Una vez estirada, doblamos a la mitad para marcar el centro y comenzamos a enrollar la masa desde un extremo hacia el centro y luego desde el otro. Luego cortamos tiras de un centímetro de ancho y levantamos las tiras para que caigan por su peso para desenrollar.

Para cocinarlas basta con hervir agua y dejarlos cocinar durante unos 5-8 minutos, o bien podemos freezarlos, guardarlos en la heladera por 24 horas o incluso dejarlos secar colgados de algún recipiente y guardarlos en bolsas secas para almacenar.

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