Sano y fácil: haz las mejores croquetas de queso y huevo en ¡pocos pasos!

Las croquetas de queso y huevo son una de esas recetas rápidas capaces de crear una tapa simple y maravillosa, son un placer apto para todos que en este plato encontrará su razón de ser sin nada de carne, solo con dos ingredientes básicos. Esta dosis de amor que vamos a preparar tiene un fondo cremoso y delicioso.

El queso que podemos utilizar es aquel que más nos guste, no hay limites a la hora de construir el bocado perfecto. El huevo será el encargado de darle un punto de sabor extra y de alegría. Toma nota de cómo se preparan unas increíbles croquetas de queso y huevo impresionantes.

Ingredientes:

• 3 huevos
• 125 gr de queso rallado
• 500 cc de leche
• 50 gr de harina
• 30 gr de mantequilla
• Pan rallado a gusto
• Aceite a gusto
• Sal a gusto

Procedimiento:

El secreto de estas croquetas son unos ingredientes sencillos cocinados a la perfección para dar lugar a un fondo ideal de sabores y de texturas. Empieza cocinando la bechamel. Este elemento es uno de los secretos de unas croquetas perfectas.

Poner la cucharada de mantequilla en un cazo al fuego. Cuando se haya derretido del todo le añades la harina. Tostar  la harina hasta que coja un poco de color y pierda ese sabor a crudo que podría acabar con las buenas sensaciones de nuestras croquetas.

Con la harina tostada incorpora la leche, poco a poco, remueve hasta que tenga la consistencia deseada. Tendrás una base que salpimentar al gusto. Retira del fuego y espera a que se temple un poco.

Añade a la masa el primer de los ingredientes, dos huevos. Lo incorporas sin dejar de remover para que esté perfectamente integrado en esa masa de croquetas.

Sigue con otro de los básicos de estas croquetas el queso rallado. Usa el tipo que más nos guste, si te gustan varios puedes incluir una mezcla de algunos tipos para conseguir que tengan un sabor más destacado.

Deja que se enfríe esta deliciosa masa de croquetas para poder trabajarla mejor. Le darás forma a las croquetas para que queden todas iguales puedes poner la masa enrollada con papel film en el congelador y cortarla en trozos.

Prepara el pan rallado y el huevo restante. Bate el huevo y coloca en un plato el pan rallado. Reboza las croquetas por estos dos elementos y fríe en abundante aceite. Conseguirás de esta manera obtener unas croquetas de huevo y queso impresionantes.

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