Estuvo al borde de la muerte en la Fórmula 1 y anunció su llegada a la IndyCar

Romain Grosjean confirmó su participación en la próxima edición de las IndyCar Series tras su salida de la Fórmula 1, marcada por el tremendo choque que sufrió con un muro en el Gran Premio de Bahréin, así como las llamas en las que estuvo envuelto cerca de medio minuto.

El piloto francés, que sufrió quemaduras en ambas manos, rubricó su fichaje por el equipo Dale Coyne dos meses después del accidente en el Gran Premio en Bahréin que le impidió finalizar la temporada en el Mundial de F1. "Estoy muy emocionado por esta oportunidad de correr en los Estados Unidos", dijo.

"Tenía diferentes opciones para la próxima temporada y decidí las IndyCar Series porque es mi prueba favorita", añadió el francés, que aseguró en la rueda de prensa que las heridas en sus manos ya se han curado "en gran medida". Tras nueve temporadas en la Fórmula 1, que incluyó un total de 179 carreras, logró 10 podios y fue séptimo en el campeonato del año 2013.

Todavía quedan algunas heridas de guerra en una de sus manos, pero espera estar recuperado u de firma plena en unos días o semanas. Romain ha reconocido que esta posibilidad de cruzar el charco y poner rumbo a América ya la barajaba desde antes del accidente de Baréin, probablemente desde una fecha cercana a la carrera de Imola.

Grosjean piensa también hacer en el futuro el WEC (Mundial de Resistencia) y las 24 Horas de Le Mans. Pero por ahora se centrará en la IndyCar y no se atreverá con los óvalos por "por amor a sus hijos". El primer test de Grosjean con el coche DCR-RWR está previsto que sea el próximo 22 de febrero en el Barber Motorsports Park.