Prepara tu propio fertilizante de jardín con solo dos ingredientes
Puede que nunca hayas conocido esta gran receta con la que puedes abonar tu jardín solo a base de miel. Descúbrela.
A pesar de ser un alimento altamente calórico por la cantidad de azúcares simples que contiene, la miel aporta una gran cantidad de nutrientes, vitaminas, minerales y antioxidantes por eso se recomienda que sea incorporada dentro de una dieta saludable. En el mundo de la cosmética son bien conocidos sus beneficios, al igual que sus propiedades para calmar la tos y problemas respiratorios.
Sin embargo, tal vez una de sus propiedades menos populares es el gran potencial que tiene en las tareas de jardinería. Es que, este súper alimento puede convertirse en un increíble abono para las plantas.
Por qué es beneficiosa la miel para el jardín
Desde hace muchos años se utiliza la miel por sus cualidades terapéuticas debido a que tiene propiedades antimicrobianas y antisépticas. En el mundo de la jardinería, esto trae grandes beneficios para el crecimiento de las raíces ya que impide la proliferación de hongos que pueden afectarlas.
Consideraciones a tener en cuenta
Esta preparación debe usarse de forma inmediata a su preparación. Puede guardarse en la heladera algunos días, pero no es recomendable.
Al ser un tratamiento casero debe incorporarse de forma constante. Lo ideal es hacerlo una vez a la semana durante la primavera y el verano. En otoño e invierno puede espaciarse a dos semanas.
Cómo preparar abono a base de miel
Solo necesitaremos miel y agua. La proporción es una cucharada de miel por cada litro de agua. Según la cantidad que quieras preparar, lo mejor es diluir la miel en una pequeña cantidad de agua y luego incorporar el resto.
Se puede entibiar un poco para asegurarnos que quede completamente diluida y mezclar bien. Luego, una vez que esté toda la preparación fría, se pasa a un envase con el que puedas regar.