Escándalo: jugó con Tigres, volvió a su país y fue detenido por violencia doméstica

El lateral Javier Portillo, del Olimpia de Honduras, fue detenido este domingo al llegar a Tegucigalpa, procedente de Estados Unidos por violencia doméstica contra su esposa, Jhennsy Turcios.

El jugador hondureño es acusado por el presunto delito de "violencia contra la mujer y quebrantamiento de condena o medidas" y fue arrestado luego de que el Juzgado de Letras Penal de Talanga, departamento de Francisco Morazán, emitiera una orden de aprehensión.

Portillo, de 39 año, fue detenido por agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), cuando regresaba a Honduras junto a sus compañeros tras caer anteTigres en el partido de semifinal de la Liga de Campeones de la Concacaf, en el Exploria Stadium, de Orlando.

Según fuentes de organismos de derechos humanos y mujeres organizadas, el aislamiento social ha aumentado la violencia doméstica, en un país donde predomina el machismo y más de 200 mujeres han muerto de manera violenta este año. Hasta el momento, la Junta Directiva del Olimpia, el equipo más popular de Honduras, no se ha pronunciado sobre la detención de Portillo.

El Olimpia, que tiene como entrenador al argentino Pedro Troglio, tiene 31 copas en sus vitrinas, desde el primer campeonato de la Liga Profesional de Fútbol en 1965. Varios futbolistas hondureños han sido denunciados en el pasado reciente en los tribunales de justicia por violencia doméstica y psicológica, incluso el incumpliendo gastos de alimentación para sus hijos.