Los opositores a Evo no logran unirse y aun no definen a su candidato
El encuentro de candidatos organizado en la ciudad de Santa Cruz por el comité cívico terminó después de unas seis horas con un documento en el que se habla de unidad, sin que haya un compromiso del anhelado frente común.
La demanda de sectores sociales contrarios a Evo Morales para enfrentar a su partido en los próximos comicios en Bolivia con un frente único no logró una respuesta positiva de los cinco principales postulantes, aunque dejaron la puerta abierta a una posible evaluación de candidaturas dentro de dos meses.
El encuentro de candidatos organizado este sábado en la ciudad oriental de Santa Cruz por el comité cívico de la región homónima terminó después de unas seis horas con un documento en el que se habla de unidad, sin que haya un compromiso del anhelado frente común para las elecciones generales del próximo 3 de mayo.
La presidenta interina, Jeanine Áñez, los exmandatarios Carlos Mesa y Jorge Quiroga, el exlíder cívico Luis Fernando Camacho y el pastor presbiteriano Chi Hyun Chung participaron en el encuentro.
Los compromisos
Tras la reunión, el presidente del Comité Cívico cruceño, Rómulo Calvo, leyó un documento que lleva su firma y las de los cinco candidatos participantes quienes ratificaron "su obligación de lograr la unidad" por la democracia y se comprometieron a asegurar "que la tiranía y la dictadura no volverán a gobernar en Bolivia".
Las fuerzas que logren representación en el Legislativo nacional prometieron buscar "un consenso parlamentario" que garantice una "gestión gubernamental pacífica".
Una campaña "limpia, pacífica y tolerante", además de la transparencia en cuanto a los recursos económicos que se emplearán para la misma son otros compromisos de estos políticos "para que no vuelvan las malas prácticas del pasado".
Nueva reunión
El punto final del "Acuerdo por la unidad de Bolivia" señala el 3 de abril, un mes antes de las elecciones, como la fecha para un nuevo encuentro en el que se evaluará el "desarrollo de la campaña" con miras a "evitar la dispersión del voto".
Con ese objetivo, en esa reunión se buscará tomar "alguna decisión definitiva" en cuanto a aquellas candidaturas que "posiblemente no tengan la preferencia electoral", afirmó Calvo.
El líder cívico cruceño destacó que haya el compromiso de ver esa posibilidad que está "sobre la mesa".
"Sabemos que tenemos un enemigo en común y todos vamos a trabajar para evitar que vuelva a reactivarse o vuelva a estar en el Gobierno central", sostuvo Calvo.
Algunas intervenciones
El encuentro incluyó discursos, debates y una reunión privada entre los cinco candidatos y algunos representantes del comité cívico cruceño.
En su intervención, la presidenta Áñez reiteró que no tenía intención de postular, pero que finalmente lo hizo al ver que no había "ningún tipo de condiciones para que haya una unidad".
La mandataria protestó contra quienes le han criticado y consideró "irrespetuoso" que le hayan "utilizado" para dar la cara durante los conflictos posteriores a la renuncia de Evo Morales.
A su juicio, la alianza de agrupaciones políticas con la que se presentará a los comicios demuestra "que la unidad del país" que ofrecen "es la unidad posible".
Por su parte, Mesa consideró que sería una "falta de respeto" hacia sus contrincantes el pedirles que se unan en torno a su candidatura y defendió que el pluralismo es un "mecanismo fundamental de la democracia".
"Afirmemos nuestra voluntad de construir una democracia para todos, pero afirmemos también que es legítimo que tengamos diferencias", manifestó el expresidente, para quien es un "avance significativo" el que los cinco políticos se hayan reunido y pudieran expresar "con veracidad y libertad" sus ideas.
El contexto
Las organizaciones políticas tienen plazo hasta el lunes 3 de febrero para inscribir a sus candidatos a la Presidencia, Vicepresidencia, Senado y Diputados.
Como ocurrió antes de los fallidos comicios de octubre pasado, los colectivos sociales que rechazaron la reelección de Evo Morales han reclamado que el resto de formaciones se una en un frente único contra su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), al considerar que mantiene un apoyo importante en el electorado boliviano.
Será la primera elección que el MAS encarará sin Morales como candidato presidencial, algo que había logrado evitar hasta ahora con recursos legales que le permitieron presentarse a los comicios de 2014 y 2019 pese al límite constitucional de dos mandatos continuos.
Ese partido ha apostado por el exministro Luis Arce como su candidato, mientras Morales dirige la campaña desde Argentina, donde solicitó refugio, y ha sido invitado por su partido para presentarse como aspirante a diputado o senador.
El expresidente indígena fue declarado vencedor en las elecciones de octubre, luego anuladas, con un escaso margen sobre Carlos Mesa.
Esos comicios fueron anulados entre denuncias de fraude a favor de Morales e informes de organismos internacionales advirtiendo de irregularidades, mientras que el exmandatario asegura que hubo un golpe de Estado para no reconocer su victoria y derrocarlo.