Vaticano

El Papa criticó al "Dios dinero" por crear "sociedades inhumanas e injustas"

El Pontífice criticó el "individualismo y el egoísmo característicos del liberalismo" y dijo que impiden "la felicidad plena" porque no tienen en cuenta a los demás

sábado, 16 de marzo de 2019 · 14:01 hs

El papa Francisco afirmó hoy que "el Dios dinero" crea "sociedades inhumanas e injustas" y animó a las empresas a no concentrarse solo en el beneficio sino también en una labor de solidaridad para favorecer el bien común.

"Solo si nos damos cuenta de que nuestra verdadera riqueza son las relaciones y no los meros bienes materiales, encontramos formas alternativas de vivir en una sociedad que no esté gobernada por el Dios del dinero, ídolo que la engaña y luego la deja más inhumana e injusta", dijo Jorge Bergoglio durante una audiencia con miembros de la Confederación de Cooperativas Italianas celebrada en el Aula Pablo VI del Vaticano.

El Pontífice criticó el "individualismo y el egoísmo característicos del liberalismo" y dijo que impiden "la felicidad plena" porque no tienen en cuenta a los demás, informó Efe.

Además, criticó que las empresas capitalistas apuntan "principalmente al beneficio" y en su lugar alabó a las cooperativas que tienen "como objetivo principal la satisfacción equilibrada y proporcional de las necesidades sociales".

"Es cierto que la cooperativa también debe buscar las ganancias, ser efectiva y eficiente, pero todo esto (lo hace) sin perder de vista la solidaridad mutua", expresó.

Bergoglio consideró que el mundo actual "está enfermo de soledad" y lamentó que haya personas que se suiciden, "conducidas por una desesperación, fruto de esta soledad".

"No podemos permanecer indiferentes ante estos dramas y todos, en la medida de nuestras posibilidades, debemos comprometernos a eliminar un poco de la soledad de los demás", sostuvo.

Finalmente señaló que la cooperación implica "superar el techo de una economía que corre el riesgo de producir bienes, pero a costa de la injusticia social" y que también significa "derrotar la inercia de la indiferencia y el individualismo, haciendo algo alternativo y no solo lamentándose".