Ingrid Grudke confesó qué fue lo más vergonzoso que le pasó en un trabajo

Una de las referentes más importantes en el ambiente del modelaje en la Argentina es Ingrid Grudke, con una exitosa y extensa carrera en las pasarelas. Sin embargo, no todos sus recuerdos son gratificantes.

En una charla con Teleshow, la modelo y actriz contó, entre otras cuestiones, dónde fueron los lugares más insólitos en los que desfiló, aunque antes reconoció que no tiene la menor idea de cuántas pasarelas recorrió.  

“En una época lo tenía registrado, pero son 27 años de desfiles de venta, desfiles de shows, desfiles de colección, en el interior del país. Son tantos que ya perdí la cuenta”, reconoció Ingrid Grudke.

Sobre los desfiles más insólitos de su carrera, recordó cada detalle como si hubiese sido ayer. “En una pasarela de hielo en Bariloche en medio del Cerro Catedral. Otro lugar insólito fue un desfile de alta costura en Córdoba, con los vestidos de Carlos Di Doménico. Era una exposición rural de vacas lecheras que valen miles de dólares y hasta tenían su peluquero para la exhibición”, contó.

“Primero desfilaban las vacas, ante los posibles compradores. Después se limpiaba el lugar y desfilábamos nosotras”, agregó Ingrid Grudke, que también tuvo su experiencia como actriz y bailarina, aunque su terreno de preponderancia hayan sido las pasarelas.

Asimismo, Ingrid Grudke, cuya carrera artística se reparte entre el modelaje, el cine, el teatro y la conducción de programas de televisión, confesó cuál fue el trabajo que más vergüenza le hizo pasar.

“No tengo vergüenza de casa nada. Pero en el 2003, con Nito Artaza, en medio de la coreografía del baile, en uno de los trucos caí mal, mi pierna rebotó contra la cara de un bailarín y se voló el taco de mi zapato”, recordó.

“Seguí bailando con el bailarín con la boca ensangrentada, pero ellos me decían: ‘Vos seguí, vos seguí’. Lo veía con la boca ensangrentada y seguimos como si nada. Fue una situación muy difícil”, agregó la modelo y actriz.