El rey Carlos III echó a su hermano Andrés del Palacio de Buckingham

El rey Carlos III mantiene los planes que tenía pensado realizar en el Palacio de Buckingham antes del fallecimiento de la reina Isabel II. Y dentro de los cambios que pretende llevar adelante están los de desvincular del palacio a ciertos miembros de la familia que no son relevantes para su reinado. De ahí que el príncipe Andrés tuvo que sacar de allí sus objetos personales.  

¿Qué sucedió entre el rey Carlos III y el príncipe Andrés?

El monarca obligó al príncipe Andrés a dejar la habitación que ocupaba en el Palacio de Buckingham, algo que en la actualidad le afecta poco ya que tiene su residencia fijada desde hace tiempo en las cercanías del Palacio de St. James, a ocho minutos andando de la propiedad real.  

¿Por qué el rey Carlos III decidió entonces apartar a su hermano del Palacio Real? 

Parece ser que el nuevo monarca quiere recuperar el prestigio que tuvo el palacio en las mejores épocas de la reina Isabel II y entre sus planes está ampliar las zonas destinadas a las visitas turísticas. Antes de la pandemia y las obras de reconstrucción posteriores, dicho edificio era capaz de recibir hasta 15 millones de turistas al año.

Por esta razón, y al considerar que el príncipe Andrés ya no es reconocido como un miembro de la familia real, el rey Carlos III cerró su despacho el año pasado y ahora tocó hacer lo mismo con su habitación. Recordemos que un año antes de su fallecimiento, la reina Isabel II le había quitado a su hijo Andrés los títulos reales que tenía debido a su vinculación con el escándalo sexual ligado al difunto explotador de menores Jeffery Epstein. 

De esta manera, según una fuente oficial cercana al diario The Sun, cualquier tipo de presencia del príncipe Andrés en el Palacio de Buckingham oficialmente acabó.  

¿Un castigo ejemplar a su hermano?

Parece ser que el flamante rey podría haber intentado castigar a su hermano por filtrar a la prensa la versión de una reapertura del escándalo Epstein mediante una hipotética acción legal en Estados Unidos con la que buscaría rehabilitar su figura pública. Bajo la excusa de los trabajos millonarios de restauración en el Palacio de Buckingham, residencia oficial londinense de la Corona Británica, Andrés, el hijo predilecto de la difunta reina Isabel II, fue apartado del palacio y de su habitación. Sus aposentos, donde el príncipe estaba acostumbrado a visitar en ocasión de sus viajes a la capital, contiene una famosa colección de osos de peluche con la que el hermano del rey Carlos III estaba profundamente encariñado.